La exhumación de Lorca rodeada de misterios, leyendas y… 3.000 fusilados…

octubre 22, 2009

Federico García Lorca

La probabilidad de dar con los restos del poeta es, atendiendo a la extensa bibliografía lorquiana, mínima. Aunque la preocupación familiar no es tanto el paradero del cuerpo si se halla e identifica -al final, entregará el ADN-, dado que ya ha solicitado que siga enterrado en el mismo lugar de la fosa y el Ayuntamiento de Alfácar ha recalificado el parque como cementerio. Lo que espanta a la familia es realmente lo contrario: ¿Y si no se encuentran los huesos?

Entonces se recrudecerán las teorías fantasmas, que desde hace décadas apuntan a que la propia familia, una vez que conoció el fusilamiento dos días después, rescató el cadáver y lo enterró, todo en secreto, en la Huerta de San Vicente, actual sede de la Fundación García Lorca en Granada. «Es absolutamente disparatado -afirma Laura García Lorca-, tanto como cuando se ha dicho que se trasladó el cuerpo a la Huerta de San Vicente o que está oculto en mi casa de veraneo en Nerja. Es totalmente improbable».

Leyendas

La especulación en torno a la muerte, desentierro y funeral, tres etapas de las teorías alrededor del fusilamiento del poeta, no han cesado. «Ya sólo falta que vengan a Fuente Grande a hacer psicofonías en busca de la voz de ultratumba», afirma Alfonso Alcalá, director del Museo García Lorca de Fuente Vaqueros, que denuncia las «leyendas disparatadas» que surgen de vez en cuando sobre el lugar en donde se encuentran los restos del poeta.

«Está muy claro que hay una operación mediática de proporciones enormes y el que se apunte a eso ya tiene cierta propaganda», sentencia el catedrático de Literatura de la Universidad de Granada Andrés Soria. Uno de ellos ha sido el científico Luis Avial, que está convencido de que la fosa fue removida «poco después de la muerte del poeta», tras haber inspeccionado la zona con un georradar, semanas antes de la inspección oficial que corrió a cargo de la Universidad de Granada. «La tierra fue removida en dos metros de largo y 50 centímetros de ancho poco después de ser enterrado el poeta», declara Avial, sin embargo es imposible datar algo así con días de diferencia. En cualquier caso, Avial ha dado pie a rescatar viejas teorías.

«Se ha dicho de todo. Incluso han llegado a escribir que me los llevé yo al chalé que tengo en Nerja», insiste Laura García Lorca, sobrina-nieta del poeta. La cuestión es que la tesis que triunfa, en cierto modo, la que presume de un Lorca enterrado en la Huerta de San Vicente corría ya en los años setenta por Granada. Y algunos, como el periodista Fernando Guijarro, la defienden a toda costa.

Un invento franquista

«Es lógico que la familia de Lorca se haya resistido hasta ahora a la exhumación de sus restos porque todo apunta a que ni el poeta ni quieres fueron asesinados allí están sepultados donde se dice», ha escrito Fernando Guijarro. Sin embargo, no sólo no hay pruebas, sino que, según interprentan Ian Gibson y otros investigadores, la teoría fue un invento del entorno franquista para intentar contrarrestar el mito de un Lorca mártir, lo mismo que el intento de reducir su asesinato a un ajuste de cuentas homosexual.

El periodista Andrés Ramos Espejo, autor de García Lorca en Fuentevaqueros afirma: «Se están diciendo muchas barbaridades y lo peor es que se están extendiendo. Estamos volviendo a los pábulos de antes y a las confusiones de antes. Lo cierto es que el asesinato de Lorca fue un asesinato político. El mismo Franco se quejó en 1956 de que el diario ABC le hubiera dedicado un artículo a García Lorca porque era un izquierdista. A Lorca lo fusilaron por eso. Y nada más».

Gibson tampoco le da pábulo. «Quienes saben si Lorca está enterrado en la Huerta de San Vicente son sus herederos, y éstos han dicho una y otra vez que no está allí y que nunca se recuperó su cadáver. Según la teoría de Guijarro son unos mentirosos. No lo puedo creer. A mi juicio se trata de un bulo más, de los muchos que circulan en Granada en torno al asunto. Una de las razones más sólidas para buscar científicamente los restos del poeta es, precisamente, acabar con esta situación indigna y aberrante, vergonzosa para España en el mundo».

Algunas de las teorías de la rumorología lorquiana tienen una raíz literaria. Fernando Marías en la novela La luz prodigiosa -luego transformado en la película dirigida por Miguel Hermoso- juega con la imaginación y da pie a teorías que luego se han lanzado a la calle, incluso de modo anónimo. El argumento literario de Marías es que Lorca es rescatado con vida tras su fusilamiento, aunque con heridas cerebrales irreversibles, sin memoria y vive sin saber quién es en el Convento de San Bartolomé hasta que muere 18 años después.

Hay quien la data en 1976, pero en realidad su difusión es mucho más reciente. El origen es un capítulo de Páginas ocultas de la historia, una serie de Televisión Española, hoy de culto, que Juan Bas y Fernando Marías diseñaron y escribieron entre 1995 y 1997. La serie, pionera del formato hoy tan extendido del falso documental y emitida en La 2, contenía trece historias, dos de ellas, La otra muerte de Federico García Lorca y La Corporación, basadas en sendas novelas de Fernando Marías, La luz prodigiosa y Esta noche moriré.

Algunos tragaron. El periodista Juan Jesús Haro Vallejo publicó en agosto de 1999 en la revista Enigmas, dirigida por Fernando Jiménez del Oso, que el poeta granadino sobrevivió al «paseíllo» y falleció por causas naturales dieciocho años después. «Los documentos gráficos así lo corroboran», se decía en el índice de la revista, en la que además se destacaba que el cuerpo fue enterrado en la casa de verano que los Lorca tenían y mantienen en Nerja, dado que allí «se están produciendo supuestos fenómenos extraños».

Lorca superviviente

La supervivencia de García Lorca a su ejecución se había apuntado por primera vez, según Haro Vallejo, en un reportaje publicado por la periodista Rocío Pérez en el diario Ideal de Granada el 19 de agosto de 1976. La pieza, titulada La otra muerte de Lorca, era la primera parte de un amplio trabajo de investigación, que fue suspendido tras esa primera entrega. «Por desgracia, el director del periódico granadino no permitió que la totalidad del relato viera la luz», se lamentaba Haro Vallejo en Enigmas.

Nada de lo que hablaba Haro Vallejo había pasado en el mundo real: no existían ni el reportaje de Ideal de 1976 ni la periodista intrépida ni el panadero ni el convento y, por supuesto, la foto era un montaje para la serie de Juan Vaz y Fernando Marías, padres del guión original. En junio de 2000, un juzgado madrileño condenó a Haro Vallejo, Jiménez del Oso y Enigmas por el plagio de la ficción de Marías y Bas, al «resultar indiscutible» que su texto «es una copia literal del trabajo» de los novelistas.

El espectáculo está a punto de comenzar. Esa hondonada, esa quebrada, en la carretera de Víznar a Alfacar, esa tumba con el cuerpo insepulto del poeta granadino -y presumiblemente de tres mil republicanos asesinados por los franquistas- es ya objetivo descarnado del ojo público.

73 años después

Excavadoras que removerán la tierra y la memoria ya están allí. Han pasado 73 años del asesinato de Lorca, y la inminente apertura de la fosa, cuyos trabajos previos han comenzado esta semana, se ha consumado como un acontecimiento mediático mundial.

La reconstrucción de los acontecimientos de la noche del 18 al 19 de agosto de 1936 sigue obsesionando a historiadores, escritores, cineastas y a la sociedad española en general. Por el momento el rompecabezas se resuelve con un relato que lleva al poeta desde la casa de los Rosales en la que se hallaba refugiado hasta el paraje de Víznar, junto a la fuente de Aynadamar, hoy Fuente Grande, donde, en compañía de un maestro cojo, Dióscoro Galindo, y dos banderilleros de la CNT, Francisco Galadí Melgar y Joaquín Arcollas Cabezas, le llegó la muerte, por lo que cuentan a la orden que dio el mismísimo Queipo de Llano por teléfono a José Valdés Guzmán, con la expresión muy castiza de: «Dale café, mucho café».

Antonio Machado recreo trágicamente en un famoso poema el instante: «Se le vio, caminando entre fusiles, / por una calle larga, / salir al campo frío, / aún con estrellas de la madrugada. / Mataron a Federico / cuando la luz asomaba. / El pelotón de verdugos / no osó mirarle la cara. / Todos cerraron los ojos; / rezaron: ¡ni Dios te salva! / Muerto cayó Federico / sangre en la frente y plomo en las entrañas / Que fue en Granada el crimen / sabed ¡pobre Granada!, en su Granada».

En la misma Granada el debate de si desenterrar o no la fosa de Lorca ya es algo popular. El realizador chileno José Rovano lo ha abordado en el documental Tres pasos para el retorno. La cinta, un homenaje a los cuatro fallecidos y al resto de los miles de represaliados republicanos que yacen en el barranco de Víznar (Granada), es una producción chileno-española que cuenta con la colaboración de la Fundación Euroárabe de Altos Estudios, la Universidad de Granada y el Patronato Federico García Lorca.

Rovano afirma: «Creo que España aún no puede arreglar su problema de reconstrucción de la memoria histórica porque aún existen muchos odios. Hasta que no se abra la fosa se va a seguir especulando con su historia«. Especulación, ciertamente. En cualquier caso, ya lo escribió en verso Rafael Alberti: «No tuviste tu muerte, la que a ti te tocaba».

La Consejería de Justicia de la Junta firmó un convenio en el que participa la Diputación de Granada, la Asociación Granadina para la Recuperación de la Memoria Histórica y el Ayuntamiento de Alfacar, término municipal en el que los historiadores han ubicado la fosa. Según Álvarez, «se podrán compatibilizar los deseos de todos los familiares».

Las incógnitas

Porque esa es otra cuestión. Porque la ‘tumba’ de Lorca está llena de incógnitas. La existencia de la fosa es indudable, en principio, según los testimonios contemporáneos. Sin embargo, su ubicación baila según hablen unos y otros. En 1986 la Diputación de Granada inauguró en Alfacar el Parque Federico García Lorca, el mismo que sirve de escenario a la romería de cada 18 de agosto. El terreno, que adquirió la institución para evitar presiones inmobiliarias, fue señalado por investigadores -sobre todo, por el propio Gibson- y testigos como el lugar más probable en el que había sido enterrado el poeta.

Para llegar a esa conclusión seis años antes la Diputación creó una Comisión de Encuestas para entrevistarse con «cuantas personas puedan aportar algún dato o informe en relación al lugar de enterramiento de Federico García Lorca». El 22 de julio de 1980, la Comisión concluyó: «Nosotros entendemos que, tras estos testimonios y con las dudas razonables, el terreno en que puedan estar los restos de García Lorca, deben situarse en el paraje que se viene repitiendo en los testimonios y que se ubica próximo a los olivos y peñascos reiteradamente citados«. En ese punto, cerca de la llamada Fuente Grande, se erigió un monolito.

Según Gibson es ahí el punto exacto: «Deben empezar donde me indicó Manolo ‘El Comunista’, donde está el olivo». Manolo ‘El Comunista’ es Manuel Castilla, el enterrador de Lorca, uno de los que esa noche fueron detenidos y salvó su vida ejerciendo el drama de tapar las tumbas de los suyos. El hispanista ratifica la información publicada en su obra El asesinato de Federico García Lorca e incluida en su biografía posterior de acuerdo con la descripción que el enterrador, Manuel Castilla, le facilitó a él y a Agustín Penón. Aportó también la declaración de dos testigos que dijeron haber visto a Lorca detenido «el 20 de agosto de 1936 a un lado de la carretera de Víznar».

El periodista Antonio Ramos Espejo, que había investigado reiteradamente la situación de la fosa, dijo entonces que era «prácticamente imposible fijar con exactitud» el lugar donde se encuentran los restos, pero apostó por las investigaciones de Gibson.

¿Pero donde se enterró?

¿Pero donde se enterró? En principio, entre Víznar y Alfacar hay, presumiblemente, cientos de fosas. Durante más de tres meses se fusiló y enterró en fosas comunes a cientos de represaliados. La cifra nunca se sabrá. La cuestión es identificar entre ellas la que cobija los huesos de Lorca, en principio con cuatro cuerpos. Porque investigadores como Víctor Fernández descartan la presencia del cadáver de Fermín Roldán enterrado junto a Lorca, porque, al menos, éste fue enterrado y asesinado una semana después.

Fernández ha localizado al hijo del hombre que enterró a Roldán. Es Antonio Mendoza García y su padre, Antonio Mendoza Lafuente, presidente de una logia masónica de Granada, que salvó la vida enterrando a los condenados a muerte en Víznar una semana después del asesinato de Lorca. Entre los 17 que enterró ese primer día estaba Fermín Roldán, algo que, además, le confesaría, según Víctor Fernández, el propio Mendoza Lafuente en 1969 al periodista granadino Eduardo Molina Fajardo, lo que éste dejó escrito en su libro Los últimos días de García Lorca.

Juan de Loxa valora una y otras teorías: «Lorca atrae a mucha gente. Por eso no es difícil que se hayan disparado las teorías sobre la localización de su tumba. Cualquier investigador o presunto investigador parece tener derecho a opinar», subraya. «Es como si se hubiera organizado una quiniela y todos estén apostando por el lugar exacto donde está enterrado», dice uno de los mayores expertos en la poesía lorquiana y director durante casi veinte años del museo dedicado al poeta en su ciudad natal.

Porque otra cuestión son quiénes están en la misma fosa que el poeta. Hasta el momento, parece que cuatro. La presidenta de la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica de Granada, Maribel Brenes, explica que «documentalmente» no se puede confirmar la existencia de ese quinto cuerpo, ya que existe la posibilidad de que «no esté o de que haya incluso más cadáveres», algo que sólo se podrá constatar «cuando se abra la fosa». De momento, la Junta de Andalucía asegura que, incluso, se podría dar por hecho la existencia de un sexto cadáver: Miguel Cobo Vilches, propietario de una venta también asesinado en torno al 19 de agosto de 1936.

«Mataban por placer»

Las autoridades granadinas sublevadas asesinaron en Granada a miles de personas, algunas fuentes señalan que tres mil son las enterradas entre Víznar y Alfacar, sobre todo a pie del barranco. Los verdugos eran en su mayoría miembros de la llamada Escuadra Negra, un grupo militar al servicio de José Valdés Guzmán, gobernador civil de Granada, que en muchos casos, según el periodista Víctor Fernández, «mataba por placer».

Uno de los criminales, Manuel Luna hablaría de los hechos en una carta: «Algunos días después cogimos al gran canalla de García Lorca -el peor de todos- y lo fusilamos en la Vega, junto a una acequia. ¡Qué cara ponía! Alzaba los brazos al cielo. Pedía clemencia. ¡Cómo nos reíamos viendo sus gestos y sus muecas!«.

El músico Ángel Barrios, gran amigo de Lorca, al enterarse del bárbaro crimen fue hasta Alfacar dos días después de los hechos. Con horror comprobó que se había arrojado cal viva donde reposaba Lorca. Los asesinos no querían dejar huella y, tras la guerra, muchas fosas fueron disimuladas con pinos. Hasta el propio Franco buscó los restos de Lorca, o al menos, ese fue el ofrecimiento que hizo a la familia García Lorca, indignados ante la ‘idea’ retomada por el investigador Miguel Caballero de trasladar los restos del poeta a, ni más ni menos, que el Valle de los Caídos. Para la sobrina de Federico y presidenta de su Fundación, Laura García-Lorca, esto es «absolutamente disparatado».

Los sobrinos de Federico García Lorca se siguen manteniendo fiel al comunicado que hicieron público en 2005. Los firmantes, los hermanos Vicenta, Concepción y Manuel Fernández-Montesinos García (cuyo padre, alcalde de Granada, fue también fusilado en agosto de 1936), y Gloria, Isabel y Laura García-Lorca de los Ríos, se declararon contrarios a desenterrar al poeta, pese a que «es perfectamente legítima cualquier iniciativa de exhumación cuando vaya a enriquecer lagunas que pueda haber en la memoria pública».

«Estamos convencidos, y en ello basamos nuestras opiniones, de que las circunstancias de la muerte de Federico García Lorca, por lo que se refiere a la constatación de la memoria histórica, son lo suficientemente conocidas como para que en su caso particular no haya que remover sus huesos», decía. En cualquier caso, Laura García Lorca, más recientemente, se ha ratificado en la idea de que los restos del poeta deben permanecer donde están porque, como decía el comunicado, «la existencia de una fosa común es parte de la verdad histórica». En cualquier caso, los Lorca reniegan de que la búsqueda de los restos se convierta en un acontecimiento -que lo será- mediático sin parangón.

Federico García Lorca

Los preparativos para la instalación de la carpa que preservará la privacidad de los trabajos de excavación de las seis posibles fosas localizadas en terrenos del parque de Alfacar, entre ellas la que pudiera albergar los restos de Federico García Lorca, siguen su curso. Ayer finalizaron los trabajos de la instalación de la malla protectora que impide la visibilidad en la zona donde se encuentran las seis fosas y hoy está previsto que comiencen las tareas para levantar la carpa que tapará los 200 metros cuadrados que la Consejería de Justicia ha ordenado acotar para garantizar la privacidad de los trabajos de exhumación, atendiendo así a la petición de los familiares de las víctimas, incluida la del poeta Federico García Lorca.

Una docena de personas -casi todos ellos voluntarios y miembros de la Asociación Granadina para la Recuperación de la Memoria Histórica (AGRMH), además de un geólogo-, finalizó los trabajos para delimitar la zona, según informaron fuentes de la Consejería de Justicia. En el lugar se personaron miembros del Instituto Andaluz de Geofísica que han localizado los seis enterramientos posibles a una profundidad de entre 0,60 y 1,80 metros, además de la historiadora y presidenta de la AGRMH, Maribel Brenes.

En principio, la carpa permitirá llevar a cabo las excavaciones con independencia de que la climatología sea adversa. De hecho, ayer amenazó lluvia durante todo el día y ya se nota el descenso de las temperaturas que puede ser más acusado en los próximos días.

Intimidad de las familias

Aunque la AGRMH ha negado en los últimos días que exista «secretismo» en torno a la fosa donde supuestamente yacen el poeta, los banderilleros anarquistas Joaquín Arcollas y Francisco Galadí, el maestro Dióscoro Galindo, el restaurador Miguel Cobo y el inspector de tributos Fermín Roldán, las medidas impuestas para «preservar la intimidad de familiares y víctimas» nunca antes se habían adoptado. La enorme carpa, que podría estar instalada en tres días para iniciar la apertura de la fosa la próxima semana, deja fuera a los medios de comunicación ante el temor expresado -no sólo por las familias sino también por la AGRMH y de la propia Administración-, de que la exhumación se convierta en un «circo mediático».

Ni siquiera se conocen los criterios que se seguirán para difundir imágenes de las fosas si bien la consejera Begoña Álvarez adelantó tras la firma del convenio que no se suministrarán detalles que «afecten a la intimidad» de las familias. Las exhumaciones de fosas practicadas hasta ahora por la AGRMH en Melegís y Loja se llevaron con absoluta discreción, sin que los medios de comunicación tuvieran conocimiento de ello hasta que no finalizaron los trabajos. Fue sólo entonces cuando se informó de los detalles de los hallazgos con una puesta en escena, en el caso de Melegís, que incluyó la exhibición de uno de los 19 milicianos republicanos desenterrados, ninguno reclamado por sus familiares al desconocerse su identidad.

La AGRMH, que solicitó en su día la exhumación al juez Baltasar Garzón -a petición de los familiares de Francisco Galadí y Dióscoro Galindo (los descendientes de este último se desmarcaron con posterioridad)- cree que no todas las fosas «pueden y deben» ser abiertas, al tiempo que niega que hayan dado prioridad a la de Alfacar por ser el lugar donde supuestamente se encuentran los restos del poeta granadino.

Ecodiario

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Cultura espera que las obras del Centro Documental de la Memoria Histórica de Salamanca se inicien en 2010…

octubre 22, 2009

Plaza de los bandos

MADRID, 22 (EUROPA PRESS)

La ministra de Cultura, Angeles González-Sinde, explicó hoy que el expediente de expropiación forzosa del Palacio de Orellana (edificio que funcionará como segunda sede del Centro Documental de la Memoria Histórica) se encuentra «paralizado» y pendiente de sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León, pero espera que las obras de rehabilitación del Centro comiencen en 2010.

«Parece que nada va a impedir que en la Plaza de los Bandos tengamos ese sede del Centro Documental de la Memoria Histórica», indicó hoy la ministra de Cultura, durante la Comisión de Cultura del Senado, ante una pregunta del senador del GPP José Muñoz Martín sobre el estado del expediente de expropiación del Palacio de Orellana.

A este respecto, la titular de Cultura alegó que el expediente de expropiación se encuentra «paralizado» por dos motivos: la «determinación de un justiprecio» y «la necesidad de acto de ocupación».

No obstante, Gonzaléz-Sinde subrayó que ya se ha presentado en Salamanca la maqueta de la ampliación del Centro Documental de la Memoria Histórica con la adecuación de las instalaciones de la antigua sede del Instituto de la Seguridad Social. IMPUGNACION POR PARTE DE LOS PROPIETARIOS

Durante su intervención, la ministra de Cultura recordó cómo en 2005 se inició el expediente de expropiación del Palacio de Orellana, impugnado por sus propietarios ante la «declaración de utilidad pública» de la expropiación que se había realizado mediante acuerdo del Consejo de Ministros.

Alegó que en marzo 2007, el Tribunal Superior Justicia dictó sentencia «favorable al Estado en ese punto» y recordó que los propietarios también impugnaron la «necesidad de ocupación». En cuanto a este aspecto, explicó que en abril de 2009 se ha presentado el escrito de conclusiones por parte de la Abogacía del Estado y se encuentra pendiente de sentencia.

En cuanto a la valoración del justiprecio, acordada casi en 29 millones de euros, la ministra declaró que esta cifra se «apartaba ostensiblemente» de los tres millones que ofrecía el representante del Ministerio de Cultura.

Finanzas.com/Google.Noticias


La Policía Judicial levantará esta tarde los restos humanos encontrados en una fosa común en Barro (Pontevedra)…

octubre 22, 2009

PONTEVEDRA, 22 Oct. (EUROPA PRESS) –

La Policía Judicial llevará a cabo esta tarde al levantamiento de los restos humanos que Voluntarios de la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica encontraron en una fosa común, ubicada en el atrio de la Iglesia de Curro perteneciente al municipio pontevedrés de Barro.

Los voluntarios apuraban esta mañana los trabajos para dejar los esqueletos completamente al descubierto, con el objeto de que durante la tarde se proceda a levantar los restos de forma individualizada. «No entrañará mayor problema porque en este caso están colocados de tal forma, uno a continuación del otro, que es difícil que se mezclen» señaló el presidente de la Asociación para la recuperación de la Memoria Histórica, Santiago Macías.

La previsión del colectivo es que la Policía Judicial «observe el proceso y custodie los restos», que tendrán un destino de momento sin concretar ya que. según señaló Macías, no se sabe «si irán a laboratorio de la asociación o intervendrá la Justicia», lo que en su opinión no entraña mayor problema ya que «en cualquier caso se trata de devolver los restos cuanto antes a las familias, para que los puedan enterrar en un lugar digno».

El trabajo de los expertos en el laboratorio será concretar cuales son los restos de Castor Cordal, de 27 años, y de Ramón Barreiro Rodríguez, de 19 años, cuyas muertes están certificadas en el registro civil en 1936.

Para ello no será necesario realizar la prueba de ADN ya que existen otras evidencias que pueden llevar a esa conclusión, como «la diferencia de edad y de talla que se conoce por fotos y porque ambos fueron tallados a la hora de hacer el servicio militar», explicó, convencido de que un simple estudio forense puede «determinar perfectamente quién es quién».

Los forenses también habrán de confirmar «si lo que se aprecia a simple vista en los cráneos son tiros de gracia, y si lo que semejan ser fracturas se produjeron antes o después de la muerte», concluyó Macías.

El sobrino de una de las víctimas de la represión franquista hallado en esta fosa de Barro, Antonio Cordal, dijo sentirse «aliviado» por el hallazgo de los restos de su tío, Castor Cordal.    «Era un ansia perdida de mi padre que murió sin poder llevarla adelante porque entonces no se daban las condiciones», dijo.

Europa press/Google.Noticias

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El Concello prefiere esconder a los fusilados de Pereiró…

octubre 22, 2009

El Faro de Vigo / La Voz de Galicia, 22-10-2009 – 22 Octubre 2009

Memoria Histórica do 36 denuncia la prohibición de colocar una placa en memoria de las 740 víctimas del franquismo enterradas en Pereiró.

La Memoria del 36 critica la prohibición del Concello de poner una placa en Pereiró

“Nos quitaron la licencia sin darnos ninguna explicación”, denuncian…

La Asociación Viguesa pola Memoria Histórica do 36 denuncia la prohibición del Concello de colocar una placa en memoria de las 740 víctimas del franquismo enterradas en Pereiró y que iban a instalar el próximo sábado en la puerta principal del cementerio.

“No entendemos esta negativa del Concello. En un principio se nos otorgó la licencia y ahora nos la deniegan sin darnos ninguna explicación”, critica el presidente de la asociación, Telmo Comesaña.

No obstante, y pese a esta desautorización de última hora, la asociación mantendrá el acto de homenaje previsto para el sábado y que se celebrará a partir de las seis de la tarde en la puerta principal del cementerio de Pereiró con un discurso y una ofrenda floral.

http://www.farodevigo.es/gran-vigo/2009/10/22/memoria-36-critica-prohibicion-concello-poner-placa-pereiro/379467.html

La Voz de Galicia, 22-10-2009

El Concello prefiere esconder a los fusilados de Pereiró

Autor: B.R.S / redac.vigo@lavoz.es

La Asociación Viguesa pola Memoria Histórica do 36 continúa cumpliendo su promesa estatutaria de ir señalando los «lugares de memoria, alí donde se cometeron asasinatos causados polos fascistas-franquistas», explican. Este año el acto se celebra este sábado a las 6 de la tarde a las puertas del cementerio de Pereiró, en el que reposan 740 hombres y mujeres que fueron eliminados en 1936 «en cumprimento das consignas do xeneral Emilio Mola», recuerdan desde este colectivo. El homenaje a estos centenares de anónimos enterrados en el cementerio vigués se concretará en los nombres de los fusilados el 27 de agosto del 1936 ante los muros de este camposanto: Enrique Heraclio Botana (fundador de la UGT); Emilio Martínez Garrido (alcalde socialista de Vigo); Waldo Gil Santóstegui ; Apolinar Torres López ; Ramón González Brunet ; Ignacio Seoane Fernández ; Manuel Rey Gómez ; A ntonino Bilbatúa Zubeldia ; Demetrio Bilbatúa Zubeldia y José Antela Conde (alcalde de Lavadores). El acto central consistirá en la colocación de una placa para recordar a los 740, con las palabras que Botana pronunció ante el pelotón de fusilamiento aquel sangriento agosto: «Gardade as actas do noso proceso. Algún día será revisado e o mundo enteiro coñecerá o crime que connosco se comete».

El año pasado, la placa que señala un «lugar de memoria» se emplazó sin problemas a las puertas del cementerio de Puxeiros en recuerdo de los restos de los fusilados que allí terminaron sus días. Sorprendentemente, el colectivo recibió a última hora la negativa municipal para colocar esta vez una placa ante la puerta principal de Pereiró. «Tiñamos todas as autorizacións pertinentes desde o pasado setembro, pero hai unha semana advertíronnos dende a Concellería de Cultura de que a lápida non podía ir na entrada principal, senón na do cemiterio civil», explica Telmo Comesaña, miembro de la directiva. El activista todavía no da crédito a esta orden: «Queren que coloquemos a nosa humilde placa onde non se ve, lexos do mausoleo do capitán Carreró, o primeiro asasiño de Vigo. Parécenos un despropósito», se lamenta. Sin embargo, la cita se mantiene para el sábado, 24, a las 6 de la tarde, ante la puerta principal del cementerio de Pereiró. Entre los participantes estará Amalia Collazo, nieta de uno de los asesinados, y varios familiares de Manuel del Río, primer encausado y asesinado el 6 de agosto del 36.

http://www.lavozdegalicia.es/vigo/2009/10/22/0003_8053963.htm

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Un nuevo final para el fin de la República…

octubre 22, 2009

Público, – 22 Octubre 2009

Ángel Viñas y Fernando Hernández Sánchez desmontan en “El desplome de la República”, la vigente lectura franquista de la contienda como una “cruzada anticomunista”

PEIO H. RIAÑO – MADRID

Hay hojarasca que ensucia el pasado. Los barrenderos de la memoria son los historiadores, que limpian y sacan brillo a los acontecimientos que se interpretan una y otra vez, a partir de capas de suciedad que no respetan las formas originales de los acontecimientos. El libro de los historiadores Ángel Viñas y Fernando Hernández Sánchez, El desplome de la República (Crítica editorial), es un estudio razonable y vehemente contra dos amenazas de su profesión: la falta de verdad y rigor en el estudio de las fuentes y la manipulación de la lectura de los hechos por los vencedores.

En su despacho en el décimo piso de la Facultad de Historia de la Universidad Complutense, una caja de cerillas para todo el que la mire, Ángel Viñas otea la ciudad y ataca la ideología. Detrás de su pajarita multicolor hay un investigador encendido contra el historiador que no busca las fuentes relevantes, y pone nombres: el académico Fernando Suárez, el profesor Ricardo de la Cierva y el popular Anthony Beevor, a quien tritura por hacer una lectura, desde la derecha anglosajona, de la Guerra Civil española en su famoso libro.

“Hay que preguntar siempre al historiador por la relevancia de las fuentes”, cuenta Viñas desde su mesa. “Hemos sido generosos, porque podríamos haber destrozado página tras página los grandes libros de la historia de la Guerra Civil, que están sesgados ideológicamente”. Por eso pide una nueva escritura del final de la República, para mostrar a unos militares y la extrema derecha de la época que quisieron “arrumbar las reformas económicas, sociales y culturales de la II República”.

Y para lograrlo hay que sacar el cepillo y arrimar la hojarasca a un lado de la calle. Lo primero con lo que acaban en este libro es con la idea de que el Ejército rebelde se sublevó por una “cruzada anticomunista”. “Hay que quitar todo eso, pero no por lo que digan los comunistas, sino porque lo dicen los documentos de la época. Lo que nos han contado durante la dictadura y la democracia es un camelo, una construcción ideológica”, vuelve a la carga, mientras Fernando aguarda su turno para añadir en cuanto puede que los historiadores se encargan de machacar las construcciones ideológicas. “La lucha por la historia es una lucha por la verdad”, dice Viñas.

Una joya en los archivos

Son conscientes de que el libro picará a los historiadores a los que acusan de no haber hecho los deberes y visitar todos los archivos por los que ellos han pasado, desde Moscú a Londres, para terminar encontrando la pequeña joya en la que fundamentan sus palabras: el informe secreto que el PCE elevó a Stalin en el verano de 1939. Una especie de auditoría en el que los informadores escribieron “las cosas que sabían que los rusos no sabían, como las relaciones de Negrín con las otras fuerzasdel Frente Popular”.

Según reconocen, “se trata de una pieza de evidencia primaria hasta ahora, no utilizada en la literatura española o extranjera” y libre de cualquier carga política. Viñas se muestra tajante al apuntar que estas 150 páginas con una cubierta en la que está escrito a mano el título Materiales que han servido para la confección de Guerra y Revolución, son informes que “no son marxistas”. “Es una descripción de hechos, no son informes de la Comintern, son muy descriptivos y de escaso contenido teórico”, cuenta para subrayar que lo único que quieren son hechos, no interpretaciones. “Es que el marxismo ahí no está” emocionado. “Podría haberlos escrito un militar franquista”.

En estos informes que explican la situación del partido no hay propaganda, y en ese caso reconocen que es un texto “muy distinto” a los escritos comunistas de la época que están acostumbrados a leer. En este documento hallan el meollo del estudio y de sus esfuerzos por alumbrar las relaciones entre Negrín, los comunistas y el golpe del coronel Casado.

Llega la conclusión esencial. El PCE no manipulaba los tiempos, sino que iba a remolque de Negrín, y eso deshace dos ideas preconcebidas: que Negrín no es un juguete de los comunistas y que tenía todavía poder en 1939. “El que cortaba todavía el bacalao eraNegrín”, Viñas de nuevo.

De esta manera se pone en evidencia la lectura de la Historia de España que creó el franquismo a su medida “y que sigue en vigor”. “El franquismo no ha desaparecido en cierta medida”. “El franquismo fundamentó su legitimidad en la victoria por las armas. Nunca le fue suficiente. Tenía que demostrar las características intrínsecas del enemigo aplastado: la antiEspaña”, escriben en las conclusiones.

Mentiras en la escuela

El desplome de la República se pregunta por la manera en la que debe escribir la historia de la Guerra Civil el historiador en el año 2009, cuando se han abierto la mayoría de los archivos que hace 10 años permanecían bajo candado. Por eso, insiste Viñas en aclarar que lo que hace el historiador es sustituir el mito por el hecho y los datos, y lo interpreta. “Hoy tenemos acceso a numerosas fuentes que hasta ahora no se había tenido y hay que explotarlas. Es así como caen muchos mitos de la izquierda y la derecha. No nos hemos comido los mitos de Azaña y Besteiro”, y es cierto que les responsabilizan de miles de muertes por su decisión de abandonar.

Con todo, se confirma que será un libro que picará y tendrá repercusión. Principalmente porque, según los dos autores, seguimos presos de la interpretación franquista, que se filtra y que llega a la enseñanza en el Bachillerato a través de los libros de texto que hoy están en vigor y que enseñan a los chavales. “Siguen reproduciendo que aquí hubo dos bandos, que hubo el peligro de una revolución soviética”, anuncia FernandoHernández, profesor.

Considera letal para la conciencia democrática que se mantenga esta lectura en las escuelas. “Hay que recuperar de una vez el nexo entre la II República y la democracia”, para recuperar el crédito de la modernización económica, política y social de la República. Y remata: “El franquismo no es la consecuencia de la guerra, es el hito”.

Contra los fantasmas franquistas

La manipulación

La principal conclusión de ‘El desplome de la República’ (Crítica) acaba con la mayor tergiversación franquista sobre el final de la Guerra Civil española: no fue el Partido Comunista de España quien empujaba o manipulaba a Negrín, sino que era el PCE el que dependía del presidente del Gobierno.

Casado, golpista

Casado manipuló las esperanzas e ilusiones de los mandos del Ejército Popular. El golpe se aprovechó de la tesis falsa de que la resistencia hacía el caldo gordo a los comunistas y a los intereses políticos. Como “buen traidor”, “fue el auténtico muñidor del golpe de fuerza que liquidó cualquier posibilidad de resistencia”.

Negrín, apoyado

El PCE, por su parte, ni preparaba un golpe ni tenía necesidad alguna de hacerlo. Propugnaba la resistencia, pero al final y en parte de su cúpula, no de manera ciega y numantina. En los dos primeros meses de 1939, los dirigentes comunistas apoyaron las acciones de Negrín y del Gobierno, del que el PCE formaba parte.

Negrín, en solitario

Para Ángel Viñas y Fernando Hernández Sánchez elpresidente Negrín es el único que se salva de la catástrofe que fue el final de la Guerra Civil española. Se salva, a pesar de sus dos errores fundamentales y graves: su pésimo manejo de la Flota y su estrategia de jugar en solitario, sin desvelar sus cartas a nadie. “Su comportamiento ha sido execrado desde los más variados ángulos”, apuntan. “Fue lo más parecido que España tuvo a un Charles de Gaulle, pero perdió”.

Rendirse y no morir

El Gobierno y su presidente hicieron piña en torno a varios puntos fundamentales: la necesidad imperiosa de que Azaña regresara a la zona centro-sur y la conveniencia de mantener la resistencia mientras se hacían gestiones para evitar una rendición con persecuciones.

Golpe innecesario

El golpe hubiera sido innecesario. Casi todos los grandes actores implicados aspiraban a lo mismo. Poner fin a una guerra sin perspectivas de victoria pero evitando en lo posible las represalias y, cuando se vio que ni siquiera esto sería posible, se intentó garantizar la evacuación.

El error de Azaña

Dejó en la estacada a los republicanos de todo cuño. Los autores del libro reconocen que la otra figura trágica de esos meses de 1939 fue Besteiro, quien cegado por falsas percepciones hizo un análisis antinegrinista y anticomunista. “Ninguno vivió lo suficiente para comprobar lo que el destino depararía a los combatientes que habían depositado en ellos su confianza”.

Bandeja de plata

El golpista Casado y sus compañeros de sedición (socialistas, anarcosindicalistas, republicanos burgueses) rindieron un magnífico servicio a Franco, al proporcionarle la oportunidad de capturar y proceder a la eliminación sistemática de lo más granado que podría haber sido el núcleo de una oposición exterior experimentada política y militarmente.

http://www.publico.es/culturas/262790/nuevo/final/republica


Francisco Espinosa: ´Al PP le queda mucha influencia de la dictadura’…

octubre 22, 2009
laopinióncoruña.es – 22 Octubre 2009

“El abandono de los políticos a la memoria histórica ha abonado el campo para las demandas sobre la represión negando el testimonio oral”

R. PRIETO | A CORUÑA

Víctimas del franquismo, testigos, documentalistas e historiadores fueron silenciadas en plena democracia. La docena de casos que el historiador extremeño Francisco Espinosa recoge en ‘Callar al mensajero’ -tres de ellos de Galicia- acabaron en tribunales, a su juicio, por el abandono de los políticos de los temas relacionados con la memoria. Espinosa, que ayer participó en Carral en unas jornadas sobre el Frente Popular, presentará hoy su libro en Santiago (11.00 horas en la Facultad de Historia) y en O Grove (20.00 h. en la Casa de la Cultura)

-Los casos que relata en Callar al mensajero, ¿son residuales o sigue habiendo muchos tabúes en el tema de la represión?

-La clave de la mayoría de los casos que se narran en el libro son de negación del testimonio oral. El problema viene de que en España se tardó mucho en permitir el acceso a los archivos. Todavía no tenemos acceso a todos ni sabemos dónde está determinada documentación.

-¿A qué archivos se ponen más trabas?

-A los del entorno eclesiástico por supuesto. Aparentemente no hay ningún problema para que tú veas la documentación, lo que ocurre es que la han ordenado ellos. Y de la catalogación que hagan yo no me fío. En España todavía no hemos llegado a los archivos del terror, como les denominan en Centroamérica; y el problema es que parece que esos archivos pudieron haber sido destruidos. Algo debe quedar, sobre todo en un país tan burócrata como este que hace 20 copias de cada cosa.

-¿Quién intenta callar más al mensajero de la memoria: la Administración local, la autonómica, la central o la Justicia, los estamentos militares o la Iglesia?

-Casi todos tuvieron una actitud contraria. Todos los que empezamos a investigar en los años ochenta sabíamos que no éramos bien recibidos en ningún sitio, ni en los archivos municipales, ni en los provinciales, ni en los militares, en los eclesiásticos ya ni nos dejaban entrar. Además había una tierra de nadie que nadie sabía que derechos tenía alguien a pedir documentación. Ahí decidía siempre el que mandaba, el encargado del archivo. En cuanto se olía que la cosa iba por el tema de la Guerra Civil ahí empezaban las pegas. Más adelante en vez de oponerse y vetarte, te decían que estaba en proceso de catalogación.

-Con la aprobación de la ley de memoria ¿se les han abierto más puertas?

-Es una situación todavía confusa. Desde que se aprobó la ley de memoria histórica que tanto trabajito costó darle salida, vino lo de Garzón, que hizo saltar por los aires todo lo de la ley de la memoria histórica. Pero luego ocurrió lo que ocurrió y entre unos y otros acabaron con la iniciativa de Garzón (de investigar los crímenes del franquismo). La situación actual es que no se sabe hacia dónde se va.

-Que estos temas acaben en los juzgados ¿responde a una dejación por parte de los políticos?

-Evidentemente. Hay una falta de acción de los políticos que en esos temas no han querido entrar porque consideran que no tiene interés y que forma parte del pasado. Ha habido ese abandono hacia las políticas de memoria y la cuestión de los archivos no les ha importado. Pero debían presuponer que iba a haber problemas. Si con el tema de la Guerra Civil y la represión no se hacía nada, como ha ocurrido, y se ponían tantas trabas a la investigación y no se ponía orden en los archivos, el campo estaba abonado para que las investigaciones surgiera y también las demandas.

-¿Echa en falta a jueces como Garzón?

-Aunque es un juez que tiene sus aristas complicadas, en España el hecho de que sólo haya uno como él es un problema. Lo malo es que hay muchos que son de la otra parte. Son los que acabaron con el auto. Después de salir el libro, pasó todo lo que pasó. El de Garzón hubiera sido el caso número 13 de Callar al mensajero por la denuncia de Manos Limpias. Espero no verlo en el banquillo por su auto sobre el franquismo, pero tampoco sería nada raro viendo la Judicatura que tenemos.

-¿Espera que el PP también se sume en el Congreso una resolución de condena del franquismo, como hizo el PP gallego?

-En noviembre de 2002 ya lo hizo, pero de forma muy light. Cuando ha tenido que definirse en el Parlamento al hablar de la memoria, el argumento que utilizó el PP fue el de leer la ley de Amnistía del 77. No tuvo otra ocurrencia durante el debate parlamentario de la ley de memoria histórica.

-¿Hay miedo en la derecha a deslegitimar el franquismo?

-Totalmente. La particularidad española es que vencieron. No es el mismo caso que Alemania, Italia o Austria. Esta gente venció, se mantuvo, siguió, controló la Transición y la orientó en el sentido que ellos querían. Estamos pidiendo que dejen de ser como han sido. La derecha se ha adaptado a la nueva situación, a las elecciones, a la situación democrática, aunque todavía les queda mucho de la influencia altísima de la dictadura. Nunca hablarán mal de su padre. En sentido genérico, de sus orígenes.

http://www.laopinioncoruna.es/galicia/2009/10/22/francisco-espinosa-pp-le-queda-influencia-dictadura/328644.html


Asturias: El fiscal superior rechaza abrir un proceso penal por la represión franquista…

octubre 22, 2009

Herrero pide el archivo de la denuncia para reabrir la fosa común de Sotrondio e identificar a los responsables de las muertes porque los delitos ya están prescritos.

Oviedo, Luján PALACIOS

El fiscal superior del Principado, Gerardo Herrero, considera que no se puede abrir un proceso penal para identificar a los responsables de la represión franquista. Herrero, que considera prescritos los delitos, ha solicitado al Juzgado de primera instancia de Laviana el archivo de la denuncia presentada por la asociación «Todos los Nombres» de Asturias para la apertura de la fosa común de Sotrondio, la identificación de las víctimas y la depuración de responsabilidades.

La Fiscalía Superior recalca que la reparación a las víctimas de la represión política que se desencadenó durante la dictadura de Franco es «de estricta justicia», pero no por ello resulta adecuado recurrir al proceso penal. Herrero especifica que la existencia de un proceso penal no puede justificarse si no es posible que cumpla con sus finalidades esenciales: esclarecer hechos penalmente perseguibles y exigir responsabilidades a los partícipes de los hechos.

En este sentido, el fiscal superior subraya que los supuestos denunciados por la asociación «Todos los Nombres» están prescritos. Herrero indica asimismo que la calificación de los mismos como crímenes de lesa humanidad, las únicas infracciones penales que no prescriben, no es aplicable porque el Código Penal actual y las normas internacionales que amparan esta figura no existían en el momento en que se cometieron los hechos, y no puede aplicarse de forma retroactiva en busca de posibles culpables.

El fiscal argumenta que la ley de Amnistía tiene unos efectos que no pueden considerarse extinguidos. Tal como señala Gerardo Herrero, todas las infracciones que se denuncian en este caso «se encuentran sin excepción bajo la cobertura de esta norma», que fue ampliamente respaldada tanto por la sociedad española como por las fuerzas políticas democráticas para su aprobación en Cortes en el año 1977, tras las primeras elecciones de la democracia.

A ello se suma que, por el transcurso de más de 70 años desde que tuvo lugar la represión franquista, «no hay constancia de posibles autores responsables de los hechos, teniendo en cuenta su seguro fallecimiento», sostiene la fiscalía, que apostilla que «tampoco se tiene conocimiento de una autoría concreta, en el caso de Asturias».

La reparación moral a través del reconocimiento de la injusticia que sufrieron los fusilados, así como la identificación y entrega de los restos a sus familiares se enmarca, según el escrito del ministerio fiscal, en la Justicia reparadora, y en todo caso «se puede acudir a la aplicación de la ley de Memoria Histórica», apunta Herrero.

La asociación «Todos los Nombres» de Asturias acogió ayer la petición de archivo de la fiscalía con resignación, toda vez que «se veía venir después de que el juez Garzón se inhibiera de la causa», indicó Luis Miguel Cuervo, presidente del colectivo en la región. Cuervo mostró su esperanza en que «algún día se demuestre que estos crímenes no prescriben y sean juzgados, digan lo que digan los fiscales». Además, el presidente de la asociación lamentó que «los crímenes de Bosnia y de Chile sí se consideren de lesa humanidad, y aquí se echa tierra encima de los que se cometieron durante el franquismo».

Luis Miguel Cuervo insistió en la necesidad de que la exhumación de las fosas comunes se judicialice, «que corran a cargo de la justicia y no de los familiares, y que los juzgados se den cuenta de una vez de que tienen que buscar a los culpables estén vivos o no».

La fosa de Sotrondio es la única de Asturias que cuenta con una demanda en la que se reclama la exhumación de los cadáveres, después de que el juez Baltasar Garzón se declarara competente el año pasado para perseguir al franquismo por las desapariciones de personas y crímenes contra la humanidad y de que posteriormente se inhibiera y remitiera los expedientes a los juzgados de cada localidad.

En el cementerio

La fosa de Sotrondio se encuentra dentro del cementerio de la localidad. Según las investigaciones de las asociaciones para la Recuperación de la Memoria Histórica, en ella habría enterradas tres personas.

Localizadas

Los familiares calculan que existen «decenas» de fosas comunes con más cuerpos sin identificar diseminadas por toda la cuenca del Nalón, como en el caso de la mina Bornaína, la curva el Returturiu, Santa Bárbara o el caso del Pozu Funeres.

http://www.lne.es/asturias/2009/10/21/herrero-rechaza-abrir-proceso-penal-represion/823669.html