En estos momentos, el Consejo General de Poder Judicial y el Tribunal Supremo urden la suspensión y el procesamiento del Juez Baltasar Garzón.
Garzón es reconocido internacionalmente por sus incesantes esfuerzos en la persecución de crímenes contra la humanidad. Pero sus investigaciones sobre las atrocidades cometidas en España durante el franquismo, junto a escándalos de corrupción, han desatado una escandalosa ofensiva política y legal dirigida a deshacerse de él y evitar que la verdad aflore.
El CGPJ y el Tribunal Supremo se enfrenta ahora a una decisión histórica: respetar la ley y las responsabilidades constitucionales, o permitir que la ideología y la impunidad prevalezcan sobre los criterios de justicia.
A las asociaciones memorialistas les incumbe la ineludible y transcendental responsabilidad de componer comprometidamente un soporte amplio y sólido, cuyo paso primero es la recogida de firmas en favor del juez Garzón y de la democracia.
Esta pelea se puede ganar o perder judicialmente, pero no se ha de perder en el campo de la opinión pública.
En definitiva, nos es obligada una actuación decidida y coordinada dentro de lo que constituiría la petición más grande de nuestra historia, alzando 1 millón de voces por la democracia y los derechos humanos:
El texto del apoyo es:
Ante el Consejo General del Poder Judicial y el Tribunal Supremo:
Como ciudadanos comprometidos con la JUSTICIA A LAS VICTIMAS DEL FRANQUISMO y con la democracia en nuestras instituciones, les pedimos que preserven la autonomía de nuestro poder judicial, garantizando que cualquier decisión tomada en los procedimientos contra el juez Baltasar Garzón se base únicamente en la evidencia y en la legislación aplicable.
La idea inicial y la actuación primera nació de asociaciones memoralistas que, ya el 25 de Febrero pasado, entregaron firmas al propio juez Garzón y que fueron registradas ante el Consejo General de Poder Judicial y en el Tribunal Supremo; habían sido recogidas a través de la siguiente dirección