Unas 600 personas se concentran en Palma para apoyar al juez Garzón…

abril 24, 2010

Imagen de la concentración de Palma. | Alberto Vera/En la fotografía cartel de La Memoria Viv@ con Valerico Canales (Padre de Fausto Canales)

La concentración ha tenido lugar en la Plaza de España de la ciudad

Manuel Aguilera | Efe | Palma

Actualizado sábado 24/04/2010

Cerca de 600 personas se han concentrado esta tarde en la Plaza de España de Palma para protestar por la causa abierta en el Tribunal Supremo (TS) contra el juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón a raíz de la presunta prevaricación cometida al investigar las desapariciones del franquismo.

La concentración ha sido promovida por grupos de internet y redes sociales como Facebook, y apoyada luego por otras asociaciones y sindicatos, como la Asociación de la Memoria Histórica de Mallorca, la Unión Cívica por la República y los sindicatos CCOO y UGT.

Banderas republicanas y carteles con el emblema «Contra la impunidad del franquismo» han protagonizado la protesta, a la que han asistido el portavoz del PSOE en el Parlament balear, Antonio Diéguez; el coordinador general de Esquerra Unida en Baleares, David Abril; y los responsables de UGT y CCOO, Manuel Pelarda y Lorenzo Bravo.

Ante unas 400 personas, el portavoz de los grupos de apoyo a Garzón creados en internet, Pau de Vilchez, ha leído un manifiesto en el que ha afirmado que España se ha convertido en el «referente de la injusticia universal» a raíz del encausamiento de Garzón.

«La persecución del juez Garzón cuestiona la imagen de la Justicia en la sociedad española y pone en entredicho nuestro sistema político y judicial en el ámbito internacional», ha dicho De Vilchez.

El portavoz ha expresado asimismo su rechazo a la «persecución» de Garzón y ha instado a las instituciones judiciales y al Gobierno español a «terminar con la impunidad de la dictadura franquista y trabajar para garantizar la justicia a 113.000 familias que hasta ahora no han tenido derecho a ella».

A sus palabras han seguido las de Miquel Mascaró, portavoz de Unidad Cívica por la República, quien ha defendido que Garzón «hizo lo que debía hacer cualquier juez decente y demócrata» al investigar los crímenes del franquismo, y ha tildado de «absurdas e irracionales» las querellas contra él del sindicato ultraderechista Manos Limpias y Falange Española de las JONS.

Para Mascaró, el que el Supremo haya encausado a Garzón supone un «golpe brutal a la democracia española», por lo que ha instado al Gobierno a que ratifique la imprescriptibilidad de los crímenes de guerra y lesa humanidad.

En último lugar ha intervenido Antònia Oliver, representante de la Asociación de la Memoria Histórica de Mallorca, entidad que, junto a la de Cataluña, presentó en el Supremo una querella por prevaricación contra el magistrado de este órgano Luciano Varela y contra el presidente de la Sala de lo Penal, Juan Saavedra

La concentración, que ha comenzado a las 18.30 horas, ha tenido réplicas semejantes en las principales ciudades de todo el país. Unas protestas que se suman a un calendario mucho más amplio de actos que comenzó a principios de abril y que se seguirán llevando a cabo de manera indefinida.

En la causa, el sindicato Manos Limpias y la asociación Libertad e Identidad -querellantes junto a Falange, que fuese hoy expulsada del procedimiento- acusan al magistrado de haber cometido un delito de prevaricación en sus investigaciones de las desapariciones del franquismo, por el que solicitan una pena de 20 años de inhabilitación.

El Vicepresidente de La Memoria Viv@ desplega la pancarta aludiendo al Valle de los Caídos con la imagen de Valerico Canales

El Mundo (Edición Baleares)


Memoria histórica: Centenares de personas protestan en Palma contra la ´persecución´ de Garzón…

abril 24, 2010

Banderas republicanas y carteles con el emblema «Contra la impunidad del franquismo» han protagonizado la protesta.

Fotografía publicada por Diario de Mallorca. Miembros de La Memoria Viv@ en la concentración de Palma de Mallorca

PALMA. Centenares de personas se han concentrado esta tarde en la plaza de España de Palma para protestar contra la «persecución» del juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón, encausado en el Tribunal Supremo por declararse competente para investigar los crímenes de la dictadura. La concentración ha sido promovida por grupos de internet y redes sociales como Facebook, y apoyada luego por otras asociaciones y sindicatos, como la Asociación de la Memoria Histórica de Mallorca, la Unión Cívica por la República y los sindicatos CCOO y UGT. Banderas republicanas y carteles con el emblema «Contra la impunidad del franquismo» han protagonizado la protesta, a la que han asistido el portavoz del PSOE en el Parlament balear, Antonio Diéguez; el coordinador general de Esquerra Unida en Baleares, David Abril; y los responsables de UGT y CCOO, Manuel Pelarda y Lorenzo Bravo. Ante unas 400 personas, el portavoz de los grupos de apoyo a Garzón creados en internet, Pau de Vilchez, ha leído un manifiesto en el que ha afirmado que España se ha convertido en el «referente de la injusticia universal» a raíz del encausamiento de Garzón. «La persecución del juez Garzón cuestiona la imagen de la Justicia en la sociedad española y pone en entredicho nuestro sistema político y judicial en el ámbito internacional», ha dicho De Vilchez. El portavoz ha expresado asimismo su rechazo a la «persecución» de Garzón y ha instado a las instituciones judiciales y al Gobierno español a «terminar con la impunidad de la dictadura franquista y trabajar para garantizar la justicia a 113.000 familias que hasta ahora no han tenido derecho a ella». A sus palabras han seguido las de Miquel Mascaró, portavoz de Unidad Cívica por la República, quien ha defendido que Garzón «hizo lo que debía hacer cualquier juez decente y demócrata» al investigar los crímenes del franquismo, y ha tildado de «absurdas e irracionales» las querellas contra él del sindicato ultraderechista Manos Limpias y Falange Española de las JONS. Para Mascaró, el que el Supremo haya encausado a Garzón supone un «golpe brutal a la democracia española», por lo que ha instado al Gobierno a que ratifique la imprescriptibilidad de los crímenes de guerra y lesa humanidad. En último lugar ha intervenido Antònia Oliver, representante de la Asociación de la Memoria Histórica de Mallorca, entidad que, junto a la de Cataluña, presentó en el Supremo una querella por prevaricación contra el magistrado de este órgano Luciano Varela y contra el presidente de la Sala de lo Penal, Juan Saavedra. Varela es el magistrado que instruye las querellas que Manos Limpias y Falange presentaron contra Garzón por investigar los crímenes del franquismo, mientras que Saavedra preside la Sala que hasta ahora ha rechazado todos los recursos presentados por el juez. Oliver ha indicado a los presentes que, aunque las querellas contra Garzón sigan adelante y finalmente se condene al juez, «la lucha continuará», ya que las víctimas del franquismo «aún no tienen justicia». «Algún día dejaréis de ser víctimas», ha afirmado conmocionada a los asistentes antes de guardar un minuto de silencio en memoria de los represaliados y contra la «ofensa» al derecho internacional de la causa contra el juez Garzón.

Diario de Mallorca


Verdad, justicia y reparación…

abril 24, 2010

justicia.jpgJOSÉ MARÍA PEDREÑO

El proceso promovido ante el Tribunal Supremo por organizaciones de ideología fascista contra el juez Baltasar Garzón ha puesto en evidencia ante la opinión pública la vigencia del pacto de silencio de la Transición y el modelo español de impunidad. Este proceso, independientemente de otros fines o intereses entrecruzados que puedan darse en él, tiene como objetivo para los franquistas y la derecha institucional mostrar su poder, circunscribir la memoria histórica, como mucho, a una pura cuestión privada y familiar, y conseguir un castigo ejemplar para amedrentar a cualquier juez que intente investigar los crímenes contra la humanidad –y, por tanto, imprescriptibles– cometidos por el franquismo.

El procedimiento instruido por Garzón puede que adoleciera de un defecto de forma por cuestión de competencia, pero no podemos considerar que declararse competente en principio o discrepar del fiscal fuera un delito, sino una cuestión de interpretación de las leyes a la que todo juez tiene derecho. Lo cierto es que, centrando la cuestión en el proceso abierto contra Garzón, nos estamos olvidando de la cuestión fundamental: las víctimas. El Poder Judicial, tras dictar la no competencia de Garzón, aún no ha indicado cuáles son los órganos jurídicos competentes para investigar los crímenes del franquismo, por lo que a día de hoy las víctimas siguen desamparadas, los franquistas y sus herederos se aferran a los numerosos órganos de poder que aún controlan, y el franquismo sociológico sigue formando parte de nuestra cultura social. Por ello, independientemente del resultado que tenga el proceso iniciado contra Garzón, la centralidad debemos ponerla en la consecución de justicia para las víctimas y la lucha contra la impunidad.

Por otro lado, si realmente queremos fortalecer la democracia, no podemos desligar, en ningún momento, la lucha por la justicia del recuerdo y la puesta en valor del proyecto político democrático de la II República que defendían las víctimas del franquismo. Hay que tener en cuenta que el fascismo español decidió realizar una operación organizada y sistemática de exterminio y represión de todos los defensores de la libertad, la justicia social y la democracia; no es, por tanto, una cuestión exclusivamente privada y familiar, sino que es algo que afecta profundamente a las raíces de la deteriorada democracia actual. No se trata sólo de recuperar restos cadavéricos para entregarlos a las familias, sino de recuperar los valores de igualdad, fraternidad y solidaridad que portaban aquellos hombres y mujeres represaliados por el fascismo español. La recuperación de estos valores, en momentos como los que vivimos, son tarea fundamental de todos.

La izquierda institucional tampoco saldrá bien parada de esta historia si no es capaz de enmendar los errores cometidos hasta la fecha. Tiene que dejar de obrar por impulsos para conseguir objetivos políticos a corto plazo, entrando en contradicciones difíciles de superar al no actuar con coherencia. Leyendo los autos del juez Varela se desprende que a Garzón se le acusa de vulnerar la Ley de Amnistía de 1977 y la Ley de la Memoria de 2007. Son dos leyes aprobadas por el Parlamento que no respetan la legislación penal internacional, por lo que, tanto los grupos parlamentarios como el Ejecutivo, tienen la obligación de manifestar su posición. La Ley de Amnistía de 1977 porque ha sido calificada por diversos estamentos internacionales –entre ellos, el Comité de Derechos Humanos de Naciones Unidas– como ley de punto final y la Ley de Memoria de 2007 porque no sólo no ha sido capaz de satisfacer las demandas de las víctimas, sus familiares y la sociedad, sino porque además da legalidad a los bandos de guerra de los golpistas del 18 de julio de 1936 y a todos los actos jurídicos represivos de la dictadura. Hoy más que nunca se hace necesario y obligatorio que el Parlamento declare la ilegalidad del golpe de Estado del 18 de julio de 1936 y del régimen fascista surgido del mismo y, por tanto, la nulidad de todos sus actos jurídicos represivos, para que los sumarios franquistas sólo sean el acta que un grupo de asesinos levantaba para dar fe de los crímenes que cometía. Esa es la validez que la democracia española debería dar a las sentencias de los tribunales de la dictadura.

Estudiando el desarrollo que el movimiento de recuperación de la memoria histórica democrática ha tenido en los últimos años, nos damos cuenta de la pluralidad existente en el mismo. Esta diversidad en objetivos, ámbitos de trabajo, estrategias jurídicas y políticas se materializaba en la existencia de un sinfín de asociaciones difíciles de unir, hasta la fecha, en un proyecto común; sin embargo, la situación que se ha creado con el procesamiento de Garzón ha permitido que todas estas asociaciones, en un ejercicio de generosidad absoluta heredado de los viejos luchadores antifascistas, el día 19 de abril, superando todo tipo de diferencias, decidieran, por encima de todo, establecer un mínimo denominador común que permitiese forjar la unidad: “Contra la impunidad del franquismo, verdad, justicia y reparación para las víctimas del franquismo”.

Esta consigna unitaria debe trasformarse no sólo en un lema, sino en un objetivo en sí mismo, sirviendo constantemente de instrumento para una movilización permanente hasta haberlo conseguido. Todos a una, como dice la canción, hemos dicho “¡basta!” y echado a andar.

José María Pedreño es Presidente de la Federación Estatal de Foros por la Memoria

Ilustración de Enric Jardí

Aunque este enlace está publicado conjuntamente con los de Público.es, hemos querido resaltarlo con la publicación individual, dado que está escrito por nuestro amigo y compañero José María Pedreño (Pte. Federación Estatal de Foros por La Memoria), y el cual además, nos parece una reflexión muy interesante y compartirda.

El editor (Jordi Carreño – Vicepersidente de la A. I. La Memoria Viv@)


El noticiario de enlaces relacionados con el acoso y apoyo a Garzón…

abril 24, 2010

Debido a la cantidad de noticias relacionados con el asunto «Garzón» os dejamos todos los enlaces en este post, a fin de no saturar los medios...Artículos y editoriales publicadas en los periódicos Público, El País y otros medios. (Pinchar encima de cada enlace)

Miembros de la asociación Memoria Viva, ante la sede del Tribunal Supremo


Frigiliana homenajea a sus víctimas de la guerra y el franquismo…

abril 24, 2010

El ayuntamiento rindió homenaje ayer a 80 vecinos del municipio que fallecieron violentamente en la Guerra Civil.

JOSÉ ALBERTO ROMERO – Sevilla – 23/04/2010 21:30

El Ayuntamiento de Frigiliana (Málaga) rindió homenaje hoy a 80 vecinos del municipio que fallecieron violentamente en la Guerra Civil y a los que fueron asesinados o represaliados durante el franquismo, un tributo que se celebró justo cuando se cumplía el 60 aniversario de la ejecución de tres jóvenes del pueblo de 18, 22 y 26 años, cuyos familiares pertenecían al maquis, el movimiento de guerrilleros antifranquistas.

«A los que nunca volvieron a casa»

El homenaje, que fue consensuado por los tres grupos políticos con representación municipal (PA, PSOE y PP), consistió en la inauguración de un monolito en un mirador de la avenida principal de la localidad.

El monolito tiene incrustada una placa en la que puede leerse: «Del pueblo de Frigiliana y su gente a quienes sufrieron, y a los que nunca volvieron a casa. Homenaje y reconocimiento a todos los hombres y mujeres de Frigiliana que fueron víctimas de la Guerra Civil y del régimen franquista».

Recibió un golpe con un hacha mientras se duchaba

La fecha elegida para el homenaje fue el 23 de abril, ya que como explicaba a Público el portavoz municipal del PSOE, Adolfo Moyano, se cumplía el 60 aniversario de un trágico asesinato durante la época del franquismo en la localidad malagueña, donde uno de los miembros de las tropas africanas de Franco sufrió un ataque con un hacha, mientras se duchaba, por parte de dos miembros del maquis.

Según relató Moyano, «tras lo ocurrido, los autores huyeron a la sierra, y las tropas africanas detuvieron a tres jóvenes que no tenían nada que ver, y cuya única culpa era tener familia de ideología republicana; los asesinaron al amanecer del 23 de abril, por eso se eligió esta fecha».

Por otra parte, Adolfo Moyano quiso hacer especial énfasis en el esfuerzo por parte de los tres grupos políticos con representación municipal por conseguir llegar a un acuerdo y así «rendir homenaje a los vecinos de nuestro pueblo».

Público.es


Aguirre elude condenar el franquismo, pero carga contra la II República…

abril 24, 2010

«Idílica la II República, nada de nada», recalcó la presidenta regional a la petición del portavoz de IU, Gregorio Gordo.

PÚBLICO.ES / EUROPA PRESS – Madrid – 22/04/2010 18:41

ENLACE A LA NOTICIA Y VIDEO ADJUNTO

Historiadores revisionistas como Pío Moa o César Vidal han encontrado esta tarde un potente altavoz en la autodenominada ‘lideresa del PP’, Esperanza Aguirre.

Acosada por los vínculos de algunos de sus consejeros con la trama Gürtel, Esperanza Aguirre se ha recreado en exponer su punto de vista de la II República y la posterior Guerra Civil durante un debate celebrado a raíz de la petición lanzada por el portavoz de Izquierda Unida, Gregorio Gordo, a la presidenta regional para que condenase el franquismo y se distancie de una supuesta colaboración con Falange en la «campaña» contra el juez de la Audiencia Nacional, Baltasar Garzón.

Ante la petición del coordinador de Izquierda Unida, la presidenta entró de lleno en el fondo del asunto y aseguró que no iba a esquivar la cuestión. «Ustedes y muchos como ustedes aparentan tener una explicación muy simple sobre los problemas de nuestra historia. Para ustedes, en 1936 los españoles disfrutaban de una modélica república en la que se respetaban los derechos de todos los ciudadanos, y de repente, una coalición de militares fascistas y de clérigos carcas, dio un golpe, provocó una guerra civil de 3 años y se mantuvo 36 años en la dictadura. Y a partir de ahí, para ustedes solamente hay buenos y malos. Buenos, todos los de un bando, y malos, todos los del otro bando», manifestó.

«Idílica la II República, nada de nada», recalcó Aguirre, jaleada y aplaudida profusamente por la bancada popular. A continuación, pidió a Gordo que condenara él «el golpe del 34 en el que participó su partido». «¿Usted condena el golpe del 34 o condena que la escolta de Prieto asesinase al jefe de la oposición?», le espetó. «La cosa no es tan sencilla, de buenos y malos. En todas las familias los había de un bando y de otro, desde luego en la mía, en los dos bandos hubo hechos heroicos y hechos vergonzosos», lamentó.

Aguirre pidió a Gordo que condenara él «el golpe del 34 en el que participó su partido.

Para respaldar sus palabras, la jefa del Ejecutivo recordó que «los tres intelectuales españoles que más defendieron la llegada de la República, Ortega y Gasset, Pérez Ayala, Marañón, huyeron de esa idílica República de usted y desde el extranjero mostraron su apoyo a Franco y en prueba de ello, enviaron a todos sus hijos al ejército que su señoría llama Ejército golpista», insistió.

Acusaciones de sectarismo

En su intervención, el portavoz de IU en la Asamblea de Madrid había pedido a la presidenta minutos antes que condenara en la Cámara «el golpe del 36, el régimen de Franco y la brutal represión contra las víctimas» , al tiempo que le recriminó «el sectarismo» del PP «contra quienes no piensan como ellos. El también coordinador de IU-CM reprochó a Aguirre «no tener empacho para tergiversar la historia, si eso les permite recibir los votos de la extrema derecha» y añadió que, «como les vale todo, son capaces de aplaudir al juez Garzón cuando dimitió como diputado socialista y luego desprestigiarle cuando sus investigaciones, como el Gürtel, no les agrada».

Gordo subrayó que ahora el PP trata de ocultar la «siniestra» historia del franquismo «para tener atados y bien atados a sus deudos en torno a su partido» y le invitó a que condene el franquismo. «De la memoria de los que participaron en el golpe no se preocupe, porque todavía tienen nombres de calles y monumentos, y fosas comunes con sus víctimas», apuntó.

Asimismo, pidió a Aguirre que no colabore con Falange en la campaña contra Garzón y pida el sobreseimiento de la causa, al tiempo que recordó que IU ha presentado en el Congreso de los Diputados una Proposición de Ley para reformar la Ley de Amnistía y adaptar su contenido a las leyes internacionales que decretan que los delitos de genocidio y lesa humanidad no prescriben nunca.

«Señora presidenta, la Ley de Amnistía no puede convertirse nunca en una excusa para evitar la persecución de las más graves violaciones de los derechos humanos cometidos durante el régimen franquista. No puede ser, de ninguna de las formas, que las víctimas tengan que pedir perdón a los culpables», aseveró el portavoz de IU.

Público.es


TRIBUNA: JOAQUÍN LEGUINA: Enterrar a los muertos

abril 24, 2010

El escaso desarrollo de la Ley de Memoria Histórica y el procesamiento contra el juez Garzón dividen a la sociedad española. Pero no hay que dejarse confundir por ideas sectarias y maniqueas.

JOAQUÍN LEGUINA 24/04/2010

Todo ser humano -héroe o villano, decente o criminal- tiene derecho al duelo por parte de aquellos que lo amaron en vida. Y ese duelo exige la presencia del cadáver con el fin de poder enterrar dignamente los restos del difunto.

Ha quedado bien claro que en los dos bandos se practicó una enfurecida ‘limpieza étnica’

Habría que ampliar el mutuo perdón y hacer que todos los muertos sean también de todos

Esa demanda, la del duelo, se transmite de padres a hijos. Así se constata en el caso de las fosas dejadas en campos y cunetas por la represión franquista. Han sido los nietos de los muertos quienes han reclamado -y reclaman- un entierro decente para sus abuelos. Este era -a mi juicio- el principal objetivo de la Ley de Memoria Histórica. Pero ¿qué ha hecho el Gobierno para cumplir esta ley desde que se aprobó? Si hemos de atender a lo que dicen los parientes de los muertos, el Gobierno ha hecho muy poco. Quizá por eso algunos deudos fueron a llamar a la puerta de Baltasar Garzón, quien, creyéndose competente para el caso, acabó por meterse en un lío de incierto destino.

Mas, sea como sea, este barullo judicial ha servido para colar algunos mensajes de muy dudosa calidad.

Mensaje nº 1: La Ley de Amnistía -como toda la Transición- fue hecha bajo presión, debido al miedo que producía el ruido de sables. Más que amnistía fue amnesia lo que se impuso.

Esto es falso y además encierra una calumnia contra quienes se pusieron de acuerdo en traer la democracia a España y para ello prepararon una Constitución consensuada. No fueron cobardes, sino generosos.

El proceso necesitaba de la previa reconciliación, por eso -y sólo para eso- se votó la Ley de Amnistía, cuya vigencia se pretende ahora negar echando mano de las normas del Derecho Penal internacional que declaran imprescriptibles los crímenes contra la Humanidad. Normas éstas que, según los especialistas consultados, no invalidan en nada la Ley de Amnistía de 1977.

En efecto, el único texto vinculante en materia de crímenes contra la Humanidad está en el convenio que se elaboró y aprobó en el seno de la Asamblea General de Naciones Unidas (Resolución 2391 -XXIII- de 26 de noviembre de 1968), que no contiene codificación alguna de normas de Derecho Internacional. Es un tratado-ley que sólo obliga a los Estados ratificantes, que han sido apenas una cincuentena, entre los que no está España ni Estados Unidos ni países importantes de la Unión Europea. Por lo tanto, la ley española de amnistía no se opuso a ninguna otra norma de origen internacional que la contradijese.

Por otro lado, el tratado por el que se instituyó el Estatuto de la Corte Penal Internacional establece en su artículo 11 que esa Corte sólo tendrá competencia respecto de crímenes cometidos después de su entrada en vigor, lo cual deja fuera los crímenes del franquismo y también, por cierto, aquellos que pudieran haber cometido -permitido- las autoridades republicanas.

En cualquier caso, ha quedado bien claro que en los dos bandos se practicó una enfurecida «limpieza étnica».

Y aquí llega el segundo mensaje perverso:

Mensaje nº 2: Los asesinados en la retaguardia republicana ya fueron «honrados» y sus victimarios perseguidos por el franquismo. Los únicos que ahora deben ser «honrados» -y sus asesinos juzgados- son los represaliados por el franquismo.

Lo que se consigue con un mensaje tan sectario es perpetuar la división. Precisamente todo lo contrario de lo que una persona bien nacida debiera desear. En efecto, lo que se debiera hacer es precisamente lo contrario, es decir, ampliar el mutuo perdón y hacer que todos los muertos -todos- sean también de todos. Que quienes cayeron bajo la represión en la retaguardia republicana no por cometer algún delito sino por ser (ser cura, ser militar, ser noble, ser rico, ser de derechas…) sean reivindicados por las gentes de la izquierda, y los asesinados por los franquistas sin haber cometido delito alguno, simplemente, ellos también, por ser (ser sindicalista, ser republicano, ser socialista, ser comunista…) deben ser reivindicados por las gentes de la derecha. ¿Con qué fin? Simplemente, para poder decir todos juntos: ¡Nunca más!

Mensaje nº 3: Todos los represaliados por el franquismo son héroes de la democracia y de la libertad.

Los ganadores de la guerra civil sostuvieron durante los años de la dictadura que «sus» muertos (1936-1939) en el frente o bajo la represión en los territorios fieles al Gobierno republicano eran «mártires de la Cruzada», afirmación que está tan lejos de la verdad como cerca de la propaganda.

Ahora, con parecido entusiasmo, se pretende que todos los enemigos del franquismo que fueron represaliados durante aquella interminable dictadura fueron «héroes de la Democracia».

Esta es, también, una afirmación sectaria, y por eso debe ser negada. Lo haré a continuación, a sabiendas del riesgo que corro con ello.

Vivir durante la guerra en la retaguardia republicana -nadie que se haya ocupado de ese asunto lo negará- representó para mucha gente un auténtico infierno de persecución y de muerte. Bastaría la lectura de la gran novela de Juan Iturralde, Días de llamas, para ilustrarlo. Y esa novela me lleva a un personaje -ligado a la UGT y al PSOE- que resultó ser un individuo siniestro: Agapito García Atadell, quien se hizo famoso en Madrid al inicio de la guerra civil como jefe de una de las Brigadas del Amanecer que operaban en la capital (también los de la FAI fueron maestros en «represión revolucionaria» y montaron, por ejemplo, una checa en el Cine Europa de la calle Bravo Murillo desde donde salían a dar paseos nocturnos y a llenar de cadáveres la Dehesa de la Villa). Estas pandillas -muy contentas de exhibirse armadas por la retaguardia y de no pisar el frente- aparecían de madrugada en los domicilios de la gente «de derechas» para dar el paseo a sus moradores y, de paso, «requisar» en su propio beneficio los bienes que encontraban en los registros de aquella casas.

Según se cuenta, Indalecio Prieto -que era ministro de la Guerra- dio la orden de detener al «compañero» García Atadell y a su cuadrilla, pero, quizá alertado, Atadell arrambló con todo lo que pudo y se fue a Marsella, desde donde tomó un barco con destino a Buenos Aires. Pero el buque hizo escala en Canarias y los franquistas (quizá avisados desde la zona republicana) lo sacaron del navío y lo tomaron preso.

Sabemos a través de Koestler (autor de El cero y el infinito), entonces encarcelado por los franquistas en Sevilla, que García Atadell estuvo en aquella cárcel y allí le dieron garrote. Probablemente, sus restos reposen en alguna fosa común de algún cementerio sevillano y ahora podrían ser exhumados… ¿Con honores?

¿Por qué no aceptamos la verdad de una puñetera vez? La inmensa mayoría de la derecha española renegó de la democracia durante la República y, desde luego, durante la guerra… Pero es que la izquierda, en gran parte, hizo lo mismo, tomando la deriva «revolucionaria». En cualquier caso, una guerra civil no es el mejor momento para la defensa de los derechos civiles ni para la discusión civilizada… «Es la hora de los hornos y no se ha de ver sino su luz», ¿recuerdan?

En fin, que entre tanto ruido se ha impuesto, al fin, una consigna según la cual «el PP se niega a reconocer la sangrante realidad de las fosas» (sic). Se llega así al último mensaje. Éste ya en clave electoral.

Mensaje nº 4: La derecha española es heredera y añorante del franquismo.

¿O sea, que casi la mitad de los votantes españoles prefieren el franquismo? No sé si los ideólogos que sostienen tal mensaje y tal barbaridad, son conscientes del disparate que perpetran con este tipo de propaganda sectaria.

Mas debo decir, para concluir, que somos muchos los que -hartos de simplificaciones- nos negamos a que la izquierda se reduzca a ser la mera expresión de una aversión, la aversión a una derecha a la que visten de maniqueo sin ningún rigor intelectual.

Joaquín Leguina es economista.

El País.com


Transición y memoria histórica…

abril 24, 2010

LUIS MARÍA GONZÁLEZ – Madrid – 24/04/2010

He firmado el manifiesto de apoyo a Garzón, que es objeto de una actuación judicial intolerable. Soy de los creen inaplazable la investigación de los crímenes del franquismo. Y estoy convencido de que Falange Española, autor junto a Manos Limpias de la querella contra Garzón, debería ser ilegal. Soy tan firme defensor de estas consideraciones como del proceso de transición democrática que conoció España.

Ahora que irrumpen contra la Transición tertulianos, columnistas y revolucionarios tardíos, bien haríamos en contextualizar los cambios y advertir que lo hecho entonces respondió, sustancialmente, a las demandas de la inmensa mayoría de los ciudadanos y ciudadanas.

Sólo unos cuantos nostálgicos del franquismo y sectores del radicalismo posfranquista abanderaron el rechazo. Las cosas se hacen cuando hay que hacerlas. Hace 33 años se construyó un pacto para acabar con 40 años de dictadura y echar a andar la democracia. No me suena que se propusiera algo mejor. Pasadas tres décadas procede normalizar aquella cultura de cambio democrático (a la que parecen resistirse grupos importantes de la justicia y de la derecha española), e investigar crímenes que ninguna ley puede impedir por ser crímenes de lesa humanidad.

El País.com