Prisioneros por la gracia de Dios…

noviembre 24, 2013

Un centenar de curas ‘rojos’ pasaron en el franquismo por la cárcel para religiosos de Zamora

La juez argentina que investiga los crímenes de la dictadura escuchará su caso en Buenos Aires

El franquismo, en el banquillo

DESCARGABLE : Texto íntegro de la querella por los crímenes del franquismo

Madrid 22 NOV 2013
 
Cuatro de las personas que estuvieron presas en la cárcel de Zamora. / txetxu berruezo
 
Ya ni se acuerdan de la última vez que pisaron una iglesia, aunque una vez pertenecieron a ella. Alberto Gabikagogeaskoa (76 años), Juan Mari Zulaika (71), Julen Kalzada (78) y Josu Naberan (72) fueron curas en la dictadura franquista, cuatro del centenar que entre 1968 y 1977 habitaron la única prisión española para sacerdotes: la cárcel concordataria de Zamora, creada “para aislar [del resto de religiosos y de los presos políticos] a los curas que se habían salido del redil, los que no apoyaban que la Iglesia fuera del brazo de Franco, los que habían tomado contacto con las barriadas obreras y se habían situado del lado del pobre, del oprimido”, explica el catedrático de historia Julián Casanova (La Iglesia de Franco, 2001).

Gabikagogeaskoa, Zulaika, Kalzada y Naberan se han sumado con otros 12 compañeros a la querella argentina contra los crímenes del franquismo. De los 16, solo dos siguieron siendo curas al salir en libertad. Franco, aquel caudillo por la gracia de Dios, y la cárcel aniquilaron su vocación religiosa. Por eso a estos cuatro hombres que un día vistieron sotana les cuesta recordar la última vez que pisaron una iglesia.

“Yo iba a un colegio de frailes. A los 10 años nos pasaron un papel preguntándonos si queríamos ir al seminario. Yo puse que sí. Es la decisión que ha marcado mi vida”, explica Zulaika. “Después empecé a tener dudas, a leer teología de la liberación…, la cárcel precipitó mi salida de la Iglesia. Los obispos nos vendieron vilmente”.

El concordato firmado en 1953 entre España y el Vaticano establecía que los curas no podían ir a una cárcel convencional. “Las penas de privación de libertad serán cumplidas en una casa eclesiástica o religiosa (…) o, al menos, en locales distintos de los que se destinan a los seglares”. Varios de los sacerdotes que terminaron en la prisión de Zamora habían sido recluidos antes en conventos, pero la solución no convenció ni al Régimen ni a la Iglesia porque no era fácil encontrar conventos dispuestos, y los que sí aceptaban a los díscolos no imponían la suficiente disciplina. Gabikagogeaskoa recuerda, por ejemplo, recibir peregrinaciones de visitas en el que fue recluido, en Dueñas. Él fue el preso que inauguró, en julio de 1968, la cárcel concordataria de Zamora. Zulaika y Felipe Izaguirre, que la primera semana de diciembre representará en Buenos Aires a todos los curas de este penal ante la juez argentina que investiga los crímenes del franquismo, fueron el segundo y tercer ingreso después de una noche muy larga. “Nos detuvieron en Eibar, en una manifestación. Nos llevaron al cuartel y nos pegaron sin parar con la pistola, por todas partes. Después, nos trasladaron a la cárcel de Martutene y allí nos desnudaron y nos hicieron inclinar, para humillarnos. Y de ahí nos mandaron a Zamora. Aquello me pareció un garaje con barrotes”, recuerda Zulaika. “¡Cuando les vi se me abrió el cielo!”, confiesa Gabikagogeaskoa, que había tenido la cárcel para él solo un día entero.

La cárcel concordataria era un pabellón aparte en la prisión provincial y los sacerdotes estaban separados de los presos políticos y comunes. En el pabellón solo había curas, pero no todos estaban allí por delitos políticos. “Había un cura que decían que había acuchillado a alguien, otro que había ayudado a practicar un aborto, y otro por homosexual”, recuerda Gabikagogeaskoa. “A mí me habían caído seis meses y un día por una homilía subversiva en la que hablaba de la tortura en las cárceles vascas”. Cuando salió, en noviembre de 1968, participó en un encierro de curas en el seminario de Derio para pedir al Vaticano “una Iglesia pobre, dinámica e indígena”, y en mayo de 1969, en pleno estado de excepción, en una huelga de hambre en la sede del obispado de Bilbao. “Me cayeron 12 años por dejar de comer cuatro días”. Gabikagogeaskoa pasó siete años preso en Zamora.

La mayoría de estos curas llegó a la cárcel por el impago de las cuantiosas multas —10.000, 25.000 pesetas…— impuestas por participar en protestas obreras, celebrar el Aberri Eguna o insistir en pronunciar sus homilías en euskera —la mayoría de los sacerdotes presos en Zamora eran vascos—, pero también fueron sometidos a 6 juicios sumarísimos y 15 del Tribunal de Orden Público (TOP). Dos del centenar de religiosos encarcelados fueron condenados por colaborar con ETA en el proceso de Burgos (1970). La antigua prisión es hoy un edificio abandonado que Daniel Monzón utilizó en 2008 para rodar la película Celda 211.

Los inviernos eran duros — “las tuberías se congelaban”, recuerda Gabikagogeaskoa— y los veranos casi peores — “el calor era insoportable”—. Los funcionarios les despertaban a las ocho de la mañana —“¿por qué tan pronto? ¿Para tener más tiempo para no hacer nada?”—. Zulaika, Gabikagogeaskoa, Naberan y Kalzada no recuerdan ya sus nombres, solo los motes —“a uno le llamábamos Koipe porque era muy aceitoso, sobón; a otro Hammurabi, porque caminaba como si fuera un emperador egipcio…”—. La comida era poca y mala así que hacían despensa común con lo que traían las visitas —“con las que hablábamos a gritos, a través de una doble malla y vigilados por un guardia que escuchaba todo”—. Para pasar el rato inventaron un deporte —“el balonbrazo, que consistía en tirar una pelota contra una pared”—. Hacían eucaristías con pan de la cárcel y algunos empezaron carreras universitarias, aunque solo les dejaron hacer el primer curso.

No había mucho para leer. “Solo llegaban El Diario de Zamora y Marca, en tiras, llenos de ventanas, porque recortaban todas las noticias políticas”, recuerda Naberan. “Un día, los funcionarios llegaron con un brazalete negro y no nos quisieron decir quién había muerto, pero nos enteramos por el Marca. Se habían olvidado de recortar la reseña del Celta-Barcelona que decía que se había guardado un minuto de silencio por la muerte de Carrero Blanco”.

Pero la mejor forma de pasar el rato fue siempre pensar en escapar. “Esa es la obligación del preso”, ríe Naberan. “No pensábamos en otra cosa. Recogíamos todo lo que creíamos que nos podía servir… hasta que se nos ocurrió lo del túnel”. Decidieron hacerlo en el lavadero porque era un cuarto cerrado con llave y lleno de serrín. “Hicimos una copia de la llave con cera y un peine. Construimos un túnel de 15 metros utilizando solo cucharas. Nos llevó cerca de seis meses y participamos diez curas”, recuerda Naberan.

El trabajo estaba dividido. “Había picadores dentro del túnel. Otros cogíamos la tierra en cajas de leche y nos deshacíamos de ella tirándola poco a poco por las duchas para no atascar nada, con mucho riesgo porque ni las duchas ni los váteres tenían puerta. Y el tercer grupo entretenía a los vigilantes utilizando la psicología del funcionario. Por ejemplo, con uno que era muy orgulloso, organizamos un campeonato de pimpón y le dejaban ganar siempre para que siempre quisiera jugar. Con otro daban charlas de control de natalidad… El día que vigilaba Balzegas no trabajábamos en el túnel. Era muy listo”, recuerda Gabikagogeaskoa.

Casi les sale bien. “Un día vino corriendo al lavadero un funcionario. El que estaba cavando el túnel se quedó dentro. Solo nos dio tiempo a taparlo, pero cuando llegó el vigilante todo estaba lleno de polvo. El funcionario estaba mosca y fue a por refuerzos. En ese momento sacamos al que estaba dentro del túnel. Volvieron los funcionarios. Pensaban que teníamos una radio escondida. No daban crédito cuando vieron el túnel. Ya se veía el otro lado. De hecho, habíamos programado la fuga para tres días después”, recuerda Naberan. Él, Gabikagogeaskoa, y Kalzada se autoinculparon para que no castigaran a nadie más.

Poco después, hicieron un motín para forzar que les trasladaran con los presos políticos. “Empezamos quemando los colchones. García Salve [Francisco, jesuita y militante del PCE] rompió todos los cristales de la cárcel. Tiramos la tele por la ventana y todo”, recuerda Naberan. Les enviaron 75 días a celdas de castigo. “De dos pasos y medio”, precisa Gabikagogeaskoa. Y entonces iniciaron una huelga de hambre. “De vez en cuando venía un médico a asustarnos diciendo que íbamos a morir. Al final nos llevaron a Madrid. Pensábamos que habíamos ganado, que nos trasladaban con otros presos políticos, pero adonde nos llevaron fue al hospital y, luego, de vuelta a la cárcel de Zamora”.

El último en salir de la prisión fue Kalzada, en marzo de 1976. Una vez fuera, uno tras otro, se fueron secularizando. “Yo me había hecho cura porque pensaba que era la forma de ser idealista. Pero cuando quedé libre ya no veía futuro a la Iglesia. Se había abrazado a la dictadura. No había nada que hacer”, explica Gabikagogeaskoa. “La Iglesia nos había decepcionado y cuando salí de la cárcel sentí la libertad como nunca. Quería disfrutarla al máximo”, añade Naberan.

Tenían casi 40 años cuando quedaron libres. Sus primeras y únicas novias se convirtieron en sus esposas. Uno de ellos vivió en pecado con su pareja un año antes de casarse. Todos lo hicieron por lo civil. Trabajaron de contables, de informáticos, de traductores de euskera, de maestros… Cuentan que en sus pesadillas más recurrentes no sueñan que les queda una asignatura pendiente, sino que siguen siendo curas.

A sus setenta y tantos han decidido sumarse a una querella que se tramita a 10.000 kilómetros de distancia, en Buenos Aires. “Quiero que se haga memoria, que le den un tirón de orejas al Estado. Es ofensivo que haya una beatificación masiva de mártires y se olviden del otro bando. En Euskadi hubo 17 curas fusilados”, afirma Zulaika. Ahora buscan a sus familiares para sumarlos a la querella. “Nos unimos a este proceso para que haya un juicio que evite la impunidad y ayude a una reconciliación, a que la gente tenga conciencia de lo que pasó y sepa cómo la Iglesia colaboró con Franco en la represión”, afirma Izaguirre, que fue torturado en una comisaría de San Sebastián. Antes de salir de la cárcel ya había escrito a Roma para borrarse de la Iglesia.

http://elpais.com/politica/2013/11/22/actualidad/1385148173_926551.html


Las víctimas del franquismo protestan en el Valle de los Caídos…

noviembre 20, 2011

Las asociaciones reclaman que el lugar deje de ser un «parque temático» del «fascismo internacional».

CAROLINA MARTÍN Madrid 19/11/2011

Doscientas personas piden un 'memorial anti-franquista' - ÁNGEL NAVARRETE

Doscientas personas piden un «memorial anti-franquista» – ÁNGEL NAVARRETE

Al grito de «¡Viva la República!» y bajo una intensa lluvia, más de un centenar de representantes de asociaciones de víctimas del franquismo se concentraron ayer frente al Valle de los Caídos un día antes del 36º aniversario de la muerte Francisco Franco. Este lugar «se ha convertido en un centro de atracción del fascismo internacional» están enterrados el dictador y el fundador de Falange, José Antonio Primo de Rivera, denunció el presidente del Foro Estatal de la Memoria, José María Pedreño, que espera verlo convertido pronto en un «memorial democrático».

Coincidiendo con la jornada de reflexión electoral y con un cambio de Gobierno en ciernes, las asociaciones por la memoria congregadas plantearon sus exigencias al nuevo Ejecutivo que salga de las urnas el 20-N para alcanzar una «solución justa» al mausoleo de granito.

Los familiares piden la «desacralización de la basílica» y que se desmantele la cruz

Así, durante la lectura del manifiesto, demandaron a los próximos mandatarios la «desacralización de la basílica, el traslado de la orden religiosa que custodia el Valle y el desmantelamiento de la gran cruz». La niebla que cubría la sierra madrileña impedía verla. También, la distancia con la concentración, situada en la misma carretera y a varios metros de la puerta que da acceso al Valle de Cuelgamuros.

Para los familiares de las víctimas que se dieron cita allí, «el monumento es un símbolo de la bochornosa complicidad de la Iglesia con la dictadura franquista y su pervivencia no hace sino perpetuar el recuerdo de esa herencia». Por otro lado, también reclamaron al próximo Gobierno que realicen la exhumación del dictador y del fundador de Falange, José Antonio Primo de Rivera, para que sean entregados a sus familias «inmediatamente».

Que el PP haga como Merkel

El Foro por la Memoria exige al PP que siga el ejemplo de Angela Merkel

Ante la previsible victoria del PP en las elecciones generales, Pedreño sostuvo que celebraría que los conservadores les dieran «la sorpresa de comportarse como sus socios europeos». En concreto, como la cancillería de Angela Merkel,que autorizó la demolición de la tumba del lugarteniente de Adolf Hitler, Rudolf Hess, y la incineración de sus restos.

Posteriormente, estos fueron arrojados al Báltico para «impedir que el enterramiento se convirtiera en un lugar de memoria y peregrinación neonazi», destacaron en el manifiesto. En este sentido, recordaron que el Valle de los Caídos es el único de los monumentos construidos como símbolo por los regímenes fascistas que sobrevive .

«Nosotros somos más humanitarios», matizó Pedreño al recordar que su petición implica entregar los restos a la familia. No obstante, el presidente de los foros duda de los cambios que traerá un Gobierno del PP. «Ya sabemos de qué pie cojea. Cuando se condenó el régimen franquista en el Parlamento Europeo, lo condenaron todas las fuerzas, salvo la ultraderecha polaca y el PP», recuerda Pedreño, que también apunta a las actuaciones contrarias de algunos ayuntamientos tras el 22-M, al «quitar calles a poetas para ponérselas a Primo de Rivera».

«El monumento es un símbolo de la complicidad de la Iglesia», afirman

Los familiares de las víctimas también reclamaron que se investigue «el número y el origen de los miles de personas allí sepultados» y que la Comunidad de Madrid retire el Valle de los Caídos como una de las paradas turísticas de «la ruta imperial» por la capital. Las organizaciones cuyos miembros llegaron de Málaga, Salamanca, Madrid, Segovia y Granada, entre otras ciudades exigieron «coherencia democrática y valor para poner fin de una vez a este gigantesco homenaje a la dictadura».

La jornada estaba deslucida por el mal tiempo, pero los asistentes no cejaron de ponerle buena cara coreando consignas contra el mausoleo como «Madrid será la tumba del fascismo», «Arriba, arriba, con la goma-2, que en el Valle se prepara, pim pam pum, la demolición» o «Benedictinos, guardianes y asesinos». Pero también se oyeron proclamas contra la monarquía. Además del rey, este año ha sido objeto de críticas su yerno.

Tareas pendientes

Durante la hora concedida por la delegación del Gobierno para concentrarse a las puertas del Valle, también se reivindicó el valor de la memoria. «El derecho a recordar no figura entre los derechos humanos consagrados por la ONU como dice Eduardo Galeano, pero hoy es más que nunca necesario reivindicarlo y ponerlo en práctica para evitar que se repita el pasado», subrayaron. Ese en el que la dictadura cometió muchos crímenes y cuyas víctimas no han recibido homenaje.

Un año más, Purificación Gallardo hizo su pequeño homenaje a su abuelo fusilado en 1940, cuyos restos no han recuperado de una fosa común, subiendo hasta el Valle de Cuelgamuros. Su deseo es conciso: «Verdad, justicia y reparación». Tres conceptos que no se han logrado en estos años. Gallardo se mostró «dolida» con el PSOE porque «tendría que haber hecho mucho más por la memoria histórica». En esta línea, Pedreño insiste en que el Gobierno de Zapatero «pasó de puntillas» por el problema, que «no es el fascismo, sino el franquismo sociológico que queda en el país».

http://www.publico.es/espana/407855/las-victimas-del-franquismo-protestan-en-el-valle-de-los-caidos


Situación de la investigación sobre la represión franquista en Madrid: Pereza o miedo intelectual…

abril 20, 2011
Santiago de Córdoba Ortega, 16 de abril de 2011 – 19 Abril 2011

Intervención en el Homenaje a las víctimas de la represión franquista en Madrid

 Amigos, amigas,… familiares de las víctimas de la represión franquista en Madrid.

Mi participación en este acto no es por méritos propios, sino por una invitación generosa de Tomás Montero, que agradezco porque me permite estar en el V aniversario del homenaje a las víctimas del franquismo y volver a veros en este lugar para la memoria después de casi un año.

Sólo soy un historiador provinciano y un viejo socialista que en 1966 se comprometió con los exiliados españoles al Sur de Francia, formó parte de la oposición sindical al franquismo en Madrid hasta 1976 y retornó a Andalucía para reconstituir con otros socialistas las organizaciones de UGT y PSOE en pueblos y aldeas de la provincia de Jaén.

Desde hace tres años vengo a Madrid, sintiendo Madrid como una nueva etapa de mi vida. Fue el 22 de septiembre de 2008 cuando comencé esa etapa. Tomás Montero lo puede atestiguar. Nos conocimos cuando en aquel día ilusionante, hoy tachado por la injusticia de la Justicia contra Baltasar Garzón, llegaba a Madrid con mi investigación bajo el brazo y registraba en el Juzgado número 5 de la Audiencia Nacional la documentación de 3.253 jienenses desaparecidos entre 1936 y 1952:

  • 2731 habían sido víctimas de la represión franquista en Jaén.
  •  388 en otras provincias y
  •  134 en Francia y Austria por el exterminio nazi.

Desde entonces mi investigación ha sido un éxodo buscando a republicanos y republicanas jiennenses desaparecidos por la represión franquista no sólo en Andalucía, sino en otras Comunidades, como la de Madrid. Han pasado casi tres años y al 31 de marzo de 2011 el número de víctimas documentadas se han incrementado en 339 nombres, de las que ahora 15 sus familiares no sólo han conseguido conocer el lugar de la muerte y circunstancias, sino que 5 han sido exhumadas y enterradas en los pueblos de origen, junto a sus familiares queridos, mientras que el resto esperan los resultados de ADN para volver después de 70 años a casa.

En 1977, cuando Gil Robles volvió del exilio dijo: “En los cuarenta años pasados hay muchos españoles culpables como el dictador o quizás más”. A esta verdad habría que añadir que hoy la democracia española también es culpable por haber olvidado no sólo a los franquistas culpables en cada uno de los pueblos de España, sino también a sus víctimas…Creo que este es uno de los objetivos que nos reúne aquí, porque no hay mayor homenaje a las víctimas del franquismo que conocer sus nombres para la historia. Es lo que Julia Conesa, una de las Trece Rosas, pidió a su madre en la carta que escribió antes que la fusilaran el 5 de agosto de 1939 en este cementerio: “que mi nombre no se borre en la historia”.

Antes de seguir quería decirle a Mirta Núñez, la admiración que siento por ella como mujer e intelectual. Desde hace años y años si se quiere conocer “Los años del terror” franquista en Madrid, ella es su principal y única referencia.

No voy a citar ahora la extensa bibliografía de Mirta, aunque sí una de sus obras, la que compartió con Antonio Rojas “Consejo de Guerra: Los fusilamientos en el Madrid de la posguerra, 1939-1945″. El conocimiento nominal de las víctimas que nos facilita es uno de los motivos por el que estamos aquí una vez más.

Según mis datos, en Madrid se conocen hasta ahora los nombres de 3.188 víctimas del franquismo. Tomando como fuente la información que facilita la Web MEMORIA Y LIBERTAD, los lugares de muerte de estas 3.188 víctimas fueron:

Lugar del fallecimiento Nº

Cementerio del Este 2 684

Cementerio de Alcalá de Henares 299

Cementerio de San Lorenzo del Escorial 79

Carabanchel – Campamento 18

Colmenar Viejo 11

Varios (cárceles, cuartelillos, etc) 97

TOTAL…………………………………………………..3.188

 A este número habría que sumar muchos nombres más, como los fusilados en las cabezas de los partidos judiciales de Madrid, que fueron muy numerosos, como en Aranjuez y en Arganda del Rey

Hace unos días intercambiando datos de investigación con mi amigo e historiador José María García Márquez, comentábamos la situación en la que se encuentra la investigación sobre la represión franquista en la Comunidad de Madrid. Entre otras cosas le decía:

“…la investigación sobre la represión franquista en Madrid se encuentra en cuna por la desidia de historiadores de Madrid. Es una vergüenza que en esa Comunidad uniprovincial, con 15 universidades (7 públicas y 8 privadas), no se haya investigado el grado y naturaleza de la represión franquista, salvo Mirta Núñez. Creo que a este estado de cosas es a lo que se refiere Miguel Artola cuando afirma: “No es que la historia de España cuente con grandes lagunas, en realidad son auténticos agujeros negros”.

“Tengo la impresión de que las 15 universidades de la Comunidad de Madrid tienen pereza o miedo intelectual a investigar la represión franquista. Les falta el compromiso social con Madrid, porque no creo que este agujero negro sea por la sorprendente conclusión a la que recientemente ha llegado Damián González, profesor de la Universidad Castilla-La Mancha. Según él «La historiografía española hace tiempo que superó la fiebre cuantificadora (absolutamente necesaria por otra parte) y ha sabido dirigir su atención hacia aspectos más cualitativos que trascienden la mera represión física de posguerra. No obstante, la asociación entre violencia franquista e inmediata posguerra continúa excesivamente asentada en el imaginario colectivo e incluso predomina en las declaraciones políticas de condena a la dictadura. Eso es algo que debe cambiar”.

“Creo que Damián González desconoce el grado de la represión física del franquismo, porque ésta aún está sin cuantificar documentalmente según los hechos y no según las impresiones. Si todos coincidimos que desde que se gestó el golpe de estado por Franco y su tropa de generales, la base en la que se sustentó la guerra civil y la posguerra fue en la represión y la eliminación del enemigo, o como afirma Mirta «La estrategia tenía como puerto final el silencio y el aislamiento para los supervivientes», el objetivo debiera ser conocer con máxima aproximación esa represión física. Si no se cuantifica hasta dónde llegó el grado de violencia, ¿qué rigor científico tendrán las investigaciones sobre represión durante la guerra civil y la posguerra?

“Hoy, después de más de 70 años, se desconocen aún las cifras de fallecidos por la represión franquista en muchas provincias y comunidades, como es el caso de Madrid. Lo peor de este desconocimiento es que allí donde eso sucede, las cifras que se conocen son las que han publicado los historiadores propagandistas del franquismo, como los generales Rafael Casas de la Vega y Ramón Salas Larrazábal, o del sacerdote Ángel David Martín Rubio. Por ejemplo, Ramón Salas, que ha tenido una gran influencia sobre los historiadores neofranquista, toda su investigación sobre la represión republicana y nacionalista se basa en interpretaciones estadísticas del INE y cuando las fuentes son los registros civiles duplica las inscripciones del lugar de la muerte con el de la naturaleza de la víctima, sobre todo si esta es nacionalista.

“Tomando como fuente la publicación «Violencia roja y azul: España, 1936-1950”», coordinada por Francisco Espinosa y editada el pasado año por Crítica, los datos de la represión republicana y franquista en Madrid es la siguiente: 3.204 víctimas por la represión franquista y 8.815 por la represión republicana.

Represión republicana: Rafael Casas de la Vega,

Represión franquista: Mirta Núñez, Antonio Rojas y Tomás Montero

“Tengo la impresión de que los historiadores y el Departamento de Historia Contemporánea de las Universidades de Madrid tienen miedo a investigar la represión franquista en esta Comunidad Autónoma. Posiblemente sea porque el estigma de la matanza de Paracuellos sigue siendo ayer como hoy la bandera del franquismo y del neofranquismo que rige los destinos de un Madrid tan universal como preso por la propaganda

“No quiero resaltar mi investigación, sólo pretendo comparar Madrid con una investigación del casi 100% del total posible de víctimas del franquismo, como es el caso de Jaén.

“Al 31 de marzo de 2011, en mi base de datos tengo 2.753 víctimas en la provincia de Jaén por las siguientes causas:

 CAUSA DEL FALLECIMIENTO EN LA PROVINCIA DE JAEN         NÚMERO

Fusilado en aplicación del bando de guerra………………………………………………..59

Fusilado en aplicación de sentencia del consejo de guerra……………………………..1.959

Fallecido por armas de fuego de la Guardia Civil……………………………………………73

Fallecido por armas de fuego de la Guardia Civil en aplicación de la “ley de fugas” ……….53

Muerte violenta……………………………………………………………………………..19

Muerte violenta por arma de fuego…………………………………………………………37

Fallecimiento en prisión por enfermedad debido a las condiciones carcelarias…………….310

Muerte violenta en prisión por torturas……………………………………………………222

Fallecimiento en prisión sin datos de su causa………………………………………………21

TOTAL………………………………………………………………………………………………………………2.753

 “Si el aparato represivo en la provincia de Jaén se montó como en Madrid, a partir del 1 de abril de 1939, y comparamos la represión en Jaén con la conocida en Madrid, deduzco que la investigación en la capital de España tiene auténticos agujeros negros. Para confirmarlo basta con conocer la estadística del aparato represivo y control franquista en el municipio de Madrid desde 1939 a 1950. Este agujero negro en la investigación, como diría Miguel Artola, sería mayor si también se sumara el de toda la Comunidad.

“Con los datos que facilita Antonio Ortiz Mateos en “Lugares de la Memoria: Las cárceles de Madrid en la posguerra”, he elaborado una estadística con el número de centros de represión y muerte en Madrid durante la posguerra. No sería descabellado afirmar que la cifra de víctimas por la represión franquista pueda superar las cuatro mil, pero ahí que demostrarlo:

 CENTROS DE REPRESIÓN Y MUERTE EN EL MUNICIPIO DE MADRID   Nº

Campos de Concentración…………………10

Comisarías de Distrito……………………..11

Cuarteles de la Guardia Civil……………….8

Delegaciones de Falange en Distritos…….10

Otros centros de detención y tortura…….10

Cárceles de mujeres……………………….6

Cárceles de hombres……………………..15

Cementerios………………………………14

TOTAL………………………………………………..84

 Hasta aquí mi exposición a José María García Márquez cuando hace unos días le pasaba por correo los nombres de 22 sevillanos fusilados en este Cementerio. Ahora no sólo confirmo mi preocupación, sino que creo que cuando la investigación del franquismo está aun en ciernes, la enseñanza de nuestra historia del pasado más próximo sigue contaminada con la enseñanza heredada del franquismo. No es una afirmación gratuita, sino una situación real. He observado en los medios de comunicación y en la calle que en las provincias donde la investigación sobre la represión franquista no ha sido objeto de un proyecto total del Departamento de Historia Contemporánea de la Universidad, o de algún historiador, el subconsciente colectivo de sus habitantes siguen bajo la enseñanza de “La Causa General” y de la historiografía neofranquista, Por el contrario, donde la investigación ha dado a conocer la magnitud exacta de la represión no sólo franquista, sino también la republicana, se terminó la manipulación e incluso el miedo al pasado.

Para terminar y confirmar lo anterior, compararé los datos que facilitaba el general Ramón Salas en su libro “Pérdidas de la Guerra” (1977) para Huelva, Córdoba y Jaén, provincias andaluzas cuyo grado de investigación actual sobre la represión republicana y franquista es casi del 100%:

En Huelva, una publicación reciente de Francisco Espinosa y José Mª García Márquez (“La desinfección del solar patrio. La represión judicial-militar en Huelva (1936-1945)”, ha desmontado la fábula estadística de Ramón Salas: Las víctimas del franquismo son 4.422 más que las facilitadas por él, pero en contra las víctimas por la represión republicanas son 336 menos:

Represión en Huelva:

Represión  franquista –  Represión republicana

Ramón Salas Larrazábal 1.597 437

F. Espinosa y José Mª García 6.019 101

Diferencia……. – 4.422 + 336

La diferencia es abismal entre la hipótesis estadística de Salas y la investigación sobre fuentes primarias de Francisco Espinosa y José Mª García Márquez.

En Córdoba, Francisco Moreno Gómez ha investigado la represión franquista en la provincia desde 1936 a 1950 (“La Guerra Civil en Córdoba, 1936-1939”, “Córdoba en la posguerra”,1939-1950” y “La resistencia armada contra Franco. Tragedia del maquis y la guerrilla”). Los resultados han sido muy semejantes a los de Huelva. Las víctimas del franquismo son 7.717 más que las facilitadas por Ramón Salas, mientras que las víctimas por la represión republicana son 582 menos:

Represión en Córdoba:

Represión  franquista –  Represión republicana

Ramón Salas Larrazábal 3.864 2.642

Francisco Gómez Moreno 11.581 2.060

Diferencia……- 7.717 + 582

Finalmente, Jaén. Mi investigación ha tenido como fuente los registros civiles de la provincia, libros de enterramientos, archivos municipales y el histórico de Jaén. Los datos de mi investigación (Todos los nombres. Borrador para un estudio de la tragedia en la provincia de Jaén, 1939-1952”) y los de Luis Miguel Sánchez Tostado (“La guerra civil en Jaén: Historia de un horror inolvidable”), demuestran una vez más la manipulación de Ramón Salas Larrazábal, cometiendo en Jaén los mismos errores intencionados que en Huelva y Córdoba: 2.147 víctimas republicanas menos y 1.790 más en el bando nacional:

Represión en Jaén:

Represión  franquista –  Represión republicana

Ramón Salas Larrazábal 606 3.509

Santiago de Córdoba (1) y

Sánchez Tostado (2) 2.753 (1) 1.719 (2)

Diferencia………… – 2.147 + 1.790

Cuando Tomás Montero me invitó a participar en este acto de homenaje a las víctimas de la represión franquista en Madrid, de las que 53 son naturales de Jaén, entre ellas Ana López Gallego, una de las TRECE ROSAS, le expuse mi preocupación sobre el estado actual de la investigación en Madrid. No comprendía los motivos por los que teniendo tan cerca tantos archivos, ahora abiertos, y la concentración de 15 universidades, la investigación sobre la represión franquista se encontrara tan lejos de los hechos, sabiendo que aquí en Madrid como en toda España, cuando el 1 de abril de 1939 cayó la II República no terminó la guerra, porque como dijo Saint-Exupéry, ilustre poeta, aviador y corresponsal de guerra francés: “aquí se fusila como se tala árboles”.

No sé si he sabido exponer bien mi preocupación sobre la investigación y la represión franquista en Madrid. No soy comunicador y me cuesta exponer en directo mi trabajo. No obstante, este era mi compromiso para con las víctimas del franquismo y sus familiares y lo he cumplido.

Gracias por vuestra atención.

Santiago de Córdoba Ortega

Madrid, 16 de abril de 2011

http://www.facebook.com/notes/ja%C3%A9n-v%C3%ADctimas-del-franquismo/situacion-de-la-investigaci%C3%B3n-sobre-la-represi%C3%B3n-franquista-en-madrid-pereza-o-m/10150153432976292


La Plataforma contra la Impunidad del Franquismo pide mañana al Supremo que se investiguen los crímenes de la dictadura

marzo 2, 2011

Intervención en un acto de La Plataforma, de uno de sus miembros . Foto Fuencisla Benavente

2/03/2011 – 18:00

La Plataforma contra la Impunidad del Franquismo entregará mañana (03/03/2011) una queja formal de desamparo en el Tribunal Supremo para denunciar el abandono de las víctimas de la dictadura y advertir sobre la «impunidad» del régimen franquista.

La Plataforma ha informado en un comunicado que entregará, a las 12.00 horas de este jueves, un documento en el que pide auxilio a la Sala Segunda del Supremo para que el Estado acometa las actuaciones oportunas para la «justa y debida» investigación de «decenas de miles» de desapariciones forzadas ocurridas durante la Guerra Civil y el franquismo. «Seguiremos demandando verdad, justicia y reparación», añade la asociación.

En el escrito, la Plataforma denuncia las «graves, masivas y sistemáticas» violaciones de derechos humanos que tuvieron lugar durante la dictadura y entre las que se cometieron delitos de detención ilegal, torturas, robo de niños o desapariciones forzadas.

Tras advertir de que estos hechos han causado un «irreparable sufrimiento» a sus víctimas y sus familiares y son «hechos criminales de naturaleza internacional», la asociación ha reclamado que las leyes de amnistía no pueden servir para evitar las investigaciones al tiempo que ha rechazado la prescripción de estos hechos delictivos.

«Tampoco es posible alegar el régimen previsto en la Ley de Memoria Histórica para negar cualquier investigación judicial pues ni la misma ley excluye tal posibilidad ni prevé en realidad sistema alguno de investigación», añade.

CRITICA EL PROCESAMIENTO DE GARZÓN

En este punto, carga contra la «notable dejación de sus deberes de sujeción a las normas» que, a su juicio, ha mostrado el alto tribunal respecto a estos hechos y ha criticado el procesamiento contra el juez Baltasar Garzón por investigar estos crímenes. A su entender, la causa abierta por un presunto delito de prevaricación contra Garzón es no sólo «injusta» sino también una «amenaza a la independencia judicial».

La Plataforma contra la Impunidad del Franquismo también hará entrega al presidente del Tribunal Supremo, Carlos Dívar, de una carta en la que denuncia la «situación de desamparo y olvido institucional» que sufren las víctimas del franquismo y solicita la puesta en marcha de una batería de medidas jurídicas y políticas para saldar «la deuda contraída por el Estado democrático con las miles de personas represaliadas, torturadas y asesinadas por la dictadura».

En concreto, solicita la nulidad de todos los procedimientos judiciales que interpusieron los tribunales franquistas por ser «notoriamente ilegales» así como la inaplicación de la Ley de Amnistía de 1977 para los delitos de lesa humanidad y la creación de una Fiscalía especializada para perseguir los crímenes cometidos durante la dictadura del generalísimo.

Asimismo, insta al Gobierno a desarrollar en profundidad la Ley de Memoria Histórica porque «no ha conseguido dar satisfacción a las demandas de las víctimas del franquismo» y a incrementar los trabajos de localización, exhumación e identificación de las fosas comunes.

La asociación apuesta por declarar un día oficial dedicado a la memoria, el recuerdo y el homenaje a las víctimas del franquismo y por introducir en los planes de estudio del sistema educativo la «máxima difusión y divulgación» de la II República y la represión franquista.

http://ecodiario.eleconomista.es/legislacion/noticias/2872448/03/11/Plataforma-contra-la-Impunidad-del-Franquismo-pide-manana-al-Supremo-que-se-investiguen-los-crimenes-de-la-dictadura.html

(Nota: resaltar el texto en negrita es inicitiva de La Memoria Viva, al igual que la foto que ilustra esta noticia.)